¿Seguiré Siendo Tu Amor Inevitable? (Sitteo)

Capítulo N° 16

Narra Simón

- Es muy bueno - Digo colocando mis brazos en su cuello para acostarlo a mi lado - Matteo.. ¿Por qué ayer despertaste en bóxer y sin camisa?

- Tenía ganas de dormir así - Reí al escuchar su respuesta

- ¿Pasa más veces? - Seguí

- No, a veces pero no mucho. Contigo me sentía más cómodo al dormir así - Responde

Le di un beso que continuamos hasta estar cansados, no podía separarme de él me encantaba. Él se subio de nuevo encima de mi como lo hizo antes de irse.

- ¿Me puedo quitar la camisa? Hace mucho calor - Pregunta Matteo

- Si.. Bueno.. No sé.. es tu casa - Respondí mientras veía a Matteo quitarse la camisa lentamente. Toqué su pecho cuando se estaba quitando la camisa de su cabeza y cuando termino de quitársela, vio lo que estaba sintiendo, vio como lo tocaba.

- Simón - Susurro. Su voz es sexy.

Posé mis manos sobre su cuello y lo bajé hasta mis labios para besar los suyos. Lo volteé para que quedara a mi lado y no encima.

- Vamos a jugar - Propuse

- Dime.

- Vamos a hacernos una pregunta y si respondemos bien, nos merecemos un beso - Dije

- Ok, empiezo - Dice - ¿Me escogerías a mí o a Ramiro?

- A ti - Respondo - ¿Escogerías a Luna, a Ámbar o a Emilia?

- A ti - Responde sincero acercándose con una caricia de su mano en mi mejilla pero lo detengo.

- Entre esas tres, no a mí. Perdiste por lo que no te corresponde un beso, Matty.

- ¿Matty? Me encantaba que me llamaras así, ¿Lo recuerdas?- Dice acariciando mi sien. Estaba embobado asintiendo, mirándole a los ojos, me hacía sentir bien. Pero fue una trampa. Se acercó a mí para robarme un beso que correspondí desprevenido.

- Eso no vale - Dije

- Lo siento, me dejé llevar. Pero en serio, me encanta que me llames así - Confiesa.

- Pero no más desvíos - Pedí

Seguimos el juego por un rato hasta que Matteo en la noche pidió la cena y después de comer apagué la luz haciendo qué se acostara en mi pecho para dormirse, estaba muy cansado porque hoy trabajo mucho porque mañana empezaría a grabar.

- ¿Seguro estás bien así? - Pregunto acariciando su cabello

Él asiente levemente con la cabeza, se quedaba dormido.

- Gracias por hoy, la pasé increíble - Dije sincero

Él levantó su cabeza con los ojos casi cerrados y besó mi boca, nos besamos un largo tiempo con los ojos cerrados.

- Hasta mañana, Simón - Dice agitado después del largo beso.

- Te amo - Susurré

Matteo se volvió a acostar en mi pecho mientras le acariciaba el cabello para quedarnos dormimos juntos.

31 de octubre de 2019: jueves

Estaba despertando y encendí mi teléfono. Ayer desde que llegué, lo apagué y no pude revisar hasta ahora. Oh no ayer fue el cumpleaños de Ramiro, pensará que me habré olvidado de él.

Ramiro: Te pasaré buscando a las 6 | 04:10pm

Ramiro: Simón, ¿Dónde estás? | 06:10pm

Ramiro: Te fui a buscar al Roller y no estás | 06:10pm

Ramiro: Simón si es una broma para ya | 06:50pm

Simón: Hola Ramiro. Perdona, ¿Podemos vernos en el parque de siempre en una hora? | 07:35am

Ramiro: Sí | 07:38am

Qué respuesta tan fría. Me levanté de la cama, acostando la cabeza de Matteo encima de una almohada.

Me cepillé y me estaba bañando para salir. Me coloqué un boxer, un pantalón y unas medias junto con los zapatos pero no conseguía camisa. Matteo no se molestará si le agarro una prestada. Empecé a buscar en su estante y conseguí una.

- ¿Ya te vas? - Me asusté y cuando volteé vi a Matteo. Ya había despertado.

- Matteo - Dije

- Te ves bien sin camisa pero quisiera que no te fueras - Dice

- Ya vuelvo. Si ya te has ido, te veré en las grabaciones - Dije acercándome a su lado para darle un beso en la mejilla pero no pasó. Matteo se fue al baño diciendo que esperara. Supongo que iba al baño.

- Nos vemos luego - Respondió al salir del baño. Se acercó y me tomó del cuello para besarme los labios. Tenía un fuerte sabor a menta.

- Adiós - Dije dándole un corto beso y poniéndome la camisa para salir de allí.

Vi la hora y supe que estaba llegando a tiempo. Cuando llegué, vi inmediato a Ramiro.

- Ramiro - Llamé.

- Ahí estás.

- Feliz cumpleaños. Lamento no haberte dicho ayer, es que salí - Di como excusa

- Esta camisa es de Matteo, ¿Estuviste con él? - Pregunta tomándome del cuello de la camisa.

- ¿Cómo sabes de Matteo? - Pregunto dando un paso atrás para hacer que me suelte la camisa.

- Simón, yo sé muchas cosas - Responde - Por eso olvidaste mi cumpleaños

- No, Ramiro. No pienses así...

- Eso es lo que hiciste. ¿Te importa tanto esa persona que no te importa lo que siento por ti? - Inquiere

- Me importas mucho Ramiro pero... No puedo mentirte pero amo a otra persona y quería hablar de eso contigo - Reconozco

- ¿Por qué ahora? Estamos felices juntos, quiero esto siempre. Ahora me cambias - Habla acercándose cada vez más

- Quiero pedirte que terminemos, Ramiro - Solté

- ¿Qué? No, por favor - Pide agarrando con sus manos mis mejillas.

- No puedo seguir contigo si amo a alguien más - Dije moviendo mi cabeza para salirme de sus manos.

- Entonces, ¿Sí es por Matteo? - Lo piensa cruzándose sus brazos

- ¿Por qué Matteo? - Pregunto, siempre cae a él.

- Sé que regresó, Simón. Yo fui quién tomó las fotos pero te digo él está con alguien más - Confiesa

- Ramiro estás mal. Es tu mejor amigo - Menciono

- Sí pero trata de quitarme a mi novio - Aclara

- Que no está tratando nada. Además, no soy tu novio, soy tu ex - Dije dándome la vuelta para irme

- Simón, espera, esto era para arreglar las cosas, no para hacerlas peor - Me dice agarrando mi brazo.

- Lo lamento, esto era lo que te quería decir y es lo que me obligaste a hacer - Me solté y caminé dejándolo solo.

Fui al hotel corriendo, no quería que Ramiro me siguiera. Al llegar, pregunté por Matteo, dijeron que estaba en su habitación. Subí y escuché la ducha, se está bañando.

- Ya llegué, Matty

- Ya salgo - Respondió

Me acosté en la cama esperando a que saliera. Esperé mientras veía mi teléfono. Cuando salió del baño, me senté dejando el teléfono en la cama y lo vi, andaba en paño. Se acercó hasta estar enfrente de mí y tomó mi barbilla para que lo viera.

- No quiero que Ramiro te vuelva a agarrar, de ninguna manera posible - Me dijo.

- ¿Qué acabas de decir?