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La preocupación de Yugyeom comenzaba a tomarlo por completo, estaba casi que sudando, mirando a su alrededor con la respiración agitada, preocupado a ver si su novio estaba a su alrededor o estaba en la casa esperándolo.

Un par de cuadras más tarde, llegó a su destino, dejando estacionado su auto junto en frente.
Tomó un suspiro, y se desabrochó lentamente el cinturón. Bajó del auto y se dirigió hasta la puerta de su casa. Allí, introdujo la llave y con miedo giró el picaporte de la puerta, sus manos temblaban y solo deseaba desaparecer de ahí.

Apenas abrió la puerta pudo observar a Jaebeom sentado en la mesa principal con un vaso con agua entre sus manos y viéndolo llegar.

- Yugye...
No pudo ni terminar de decir su nombre, cuando Yugyeom subió corriendo por las escaleras hasta su habitación, su cuerpo le temblaba sentía como sería capaz de desmayarse.
Cerró rápido la puerta y le metió seguro, se apoyó en la puerta, deslizando su cuerpo hasta quedar sentado allí, evitando que alguien pudiese entrar.

Jb lo vio y de inmediato se puso de pie, preocupado se dirigió hasta la habitación de ambos donde se hallaba el menor.
- Yugyeom...
Tocó la puerta varias veces y su voz salía dulce.
- Ábreme la puerta...necesitamos hablar.
Se sentía en la voz de Jb, su arrepentimiento.

Yugyeom hacía lo posible por no comenzar a llorar, pero eso fue prácticamente imposible, cubrió su boca con su mano diestra para que su mayor no lo escuchase sollozando.

- Vamos, amor. Sé que estuve mal por lo que te hice, estuve muy mal...
Dejó apoyada su cabeza a la puerta, esperando a que le dijese algo.

Yugyeom no entendió nada de lo anterior, por eso, necesitaba explicaciones para algo como eso. Así que con se puso de pie y con miedo giró la ficha del seguro de la puerta. A continuación se quedó sentado en la cama, esperando las explicaciones de su novio.
- Adelante.
Se secó las lágrimas.

Jb sintió el sonido del seguro y colocó una mano en el picaporte, y luego de escuchar su voz, se dignó a entrar.

Yugyeom ni siquiera miró a los ojos de aquel que para él, ahora era un extraño, pues estaba tan decepcionado de él.

Jb comenzó a dar unos pasos para acercarse hasta la cama y tomar asiento al lado del menor.
- Amor, lamento mucho lo de esta mañana, jamás fue mi intención lastimarte, ni tampoco quiero hacerlo.
Sé que algunas veces me comporto mal contigo, pero es que no quiero que nadie se te acerque, estoy muy enamorado de ti y no quiero que me dejes por otra persona.

Jaebeom trató de colocar sus manos sobre las de Yugy, quien seguía con su cabeza agachada sus manos entrelazadas, escuchándolo, pero de inmediato Yugyeom corrió sus manos, no quería que Jb lo tocara, estaba.

- Por favor, dime algo...Yugy..
Suplicó y trató de que este lo comprendiera.

- ¿Y esa es una razón para pegarme..?
Por fin, Yugyeom había reaccionado, su voz estaba quebrada y sentía como su mundo se acababa, era el hombre que amaba y le hacía esto.

- Lo lamento mucho, en serio lo lamento mucho. Estuve llorando por ese ataque de ira que tuve, no fue mi intención, pero mi cuerpo reaccionó mal. Te pido miles de disculpas y no me iré sin una respuesta. ¿Me perdonas?

El menor levantó su mirada hacia él y sus ojos comenzaron a llorar, no podía dar una respuesta, sin saber que sucedería más adelante.
- Yo...no lo sé, en verdad te amo mucho y es por eso que quise tener una relación contigo, porque te amo y solo quiero a un hombre en mi vida, pero jamás me imaginé que llegarías a este punto por unos estúpidos celos, ni siquiera confías en mí, como puedo saber si no volverá a pasar.

El mundo de Jaebeom se vino abajo luego de ver lágrimas en el rostro de su amado, había prometido cuidarlo y protegerlo para que nadie le haga daño, y él fue el primero en hacerlo.

Se colocó de rodillas frente a él y tomó las manos del menor, llevándolas a su pecho.
- Te prometo que no volverá a pasar nunca más, mi amor. Perdóname.
Sus labios se posaron sobre las pálidas manos de su menor, dando besos de algodón en ellas.

- ¿Lo prometes, amor?
Conectó su mirada con el mayor y ambos se quedaron mirando.
- Lo prometo, cariño.
Jaebeom dibujó una sonrisa en su rostro.
- Está bien, claro que te perdono, Jae.
La sonrisa de Yugyeom no mostró más que amor al saber que se habían reconciliado.

- Te amo tanto, tanto tanto Kim Yugyeom. Me vuelves loco.
Jaebeom tomó el rostro del pequeño y comenzó a besarlo con tanta suavidad, llevándolo hacia atrás levemente y se colocó entre sus piernas, alzando su cuerpo hasta el centro de la cama.
Sus besos comenzaron a bajar por el cuello del menor dejando un camino de marcas rojizas en él, comenzando a desprender muy lentamente cada botón de la camisa de Yugyeom, mientras frotaba su bulto con el del menor.

- Jaebeom, quiero que me hagas el amor...
Susurró el pequeño al oído de su galán, dejándose llevar por él.
- No hace falta que me lo digas..
El opuesto comenzó a quitarse su ropa junto con la del menor, ambos quedaron desnudos. Tomó las sábanas y quedaron hundidos en el placer abajo de aquellas.

Jb alineó su miembro en la exquisita entrada del más alto, introduciendo el mismo con suavidad ya que no quiso ni lubricar, el menor soltó un gemido que resonó el la habitación y rodeó el cuello de su novio con sus brazos, sintiendo las embestidas que le daba, ahogando sus gemidos en los labios de su amado, casi que ni podía respirar de la calentura que sentía, el mundo de ambos no existía en ese momento, solo ellos dos y su amor.

ESTE "AMOR" CONTINÚA, ESTOY BIEN READY PARA MOSTRARLES LO QUE PASA, SOLO PACIENCIA!!!.

𝘕𝘰 𝘵𝘰𝘥𝘰 𝘦𝘴 𝘤𝘰𝘭𝘰𝘳 𝘥𝘦 𝘳𝘰𝘴𝘢𝘴 ; 𝘽𝙜𝙮𝙚𝙤𝙢Donde viven las historias. Descúbrelo ahora