- Buenas tardes Bateman, señorita los esperan- seguimos a la mesera que nos llevó a la mesa donde ya los chicos nos esperaban
- Hola pensé que ya no venían - Hanna me dió un abrazo y luego Jenny también me abrazo y a los chicos solo le sonreí - Tenia un examen y estaba más complicado de lo que pensé - me senté en la silla que la mesera me ofrecía -¿Cómo lo llevan?- susurro Jenny como si tuviera miedo a la respuesta - Hemos tratado de mantener la calma a pesar de todo - observo a Nick quien tenía la mirada en su celular y su frente estaba fruncida. - Estabamos pensando en llamar a su hermano o algo- habla David- su actitud no es normal, su forma de hablar nada es normal, siempre fue una persona manipuladora pero nunca llegó a lastimar a alguien - No directamente- susurro Hanna - Realmente no me quiero meter mucho en el tema- me encojo de hombros - no la conocí por lo tanto no tengo mucho derecho para opinar - Nick levanta por fin la mirada de su celular y me sonríe. El mesero nos deja nuestra comida que al parecer los chicos ya habían ordenado. - Te entendemos además que tienes que hablar con tu papá o ¿ya lo hiciste?- niego - Estoy esperando que mi hermano se desocupe un poco - De hecho - David deja su vino en la mesa- dile que estoy 100% interesado en su caso - me sonríe y todos en la mesa lo hacen
A los segundos siento mis ojos picar, ¿Por que me ayudan? ¿Por que me defienden? Cuando Fabiola era su amigas antes de mi
-¿Por que lloras?- sin darme cuenta las lágrimas empezaban a rodar por mis mejillas, todos miraban preocupados exepto Nick que al parecer ya entendía el por qué - Es solo que - sollozó- Fabiola es amiga de ustedes - me limpio un poco las lágrimas- y no me parece justo, todo lo que hacen por mi yo solo nose ni porque lloro -oye, quizás tú estás en el medio de todo esto- Hanna me abraza- y quizás estás agobiada por todo esto, pero quiero que entiendas algo- se separa de mi y me mira fijamente- eres parte de nosotros, nosotros te protegeremos y estaremos contigo en lo que podamos- la abrazo de vuelta -Dime eres una adolescente bruja o algo- me señaló con el tenedor Javier- porque te has ganado el corazón de cada uno de nosotros - todos reímos - Gracias- les sonrió y ellos lo hacen también - Bueno quería decirle que ya no viviremos en Santa Mónica- todos nos miran confundidos -¿ Paso algún problema con la casa?-pregunta Javier - Hace poco fue un abogado a la casa, con unos papeles que señalaban que la casa es de Fabiola -¿ Qué? ¿Y eso porque? Tú la pagaste - Si, llegue a hacer 3 pagos, dos en efectivo y uno se hizo en chequé, a nombre de Fabiola - Estás jodido - negó David- -¿Y eso que?- pregunta Hanna - Al tener un pago al nombre de Fabiola queda la propiedad al nombre de ella, si lo hubiera hecho a su nombre era de el, aunque la propiedad este a su nombre quien la pago a su nombre fue ella- habla David - Nunca pensé que algo así pasara- se encogió de hombros -Idiota - Hanna le tira una servilleta a David- por eso no me dejas pagar la casa a mi nombré- lo mira feo - El próximo pago es a mi nombre - todos reímos -Se pueden quedar con nosotros- habla David luego de varios minutos en silencio, cada quien saboreando su comida. -Gracias solo serían unos días- Habla Nick y David asiente
...
Salgo del baño ya con mi pijama puesta y está vez no es la de patitos. Paso por la habitación de Nick, que se encuentra en la cama con su computadora en el regazo. Se preguntan cuántos días han pasado, bueno a pasado una semana desde que Fabiola apareció, entre Nick y yo nada nuevo le e dado su propio espacio y tiempo porque entiendo y se que no es fácil para el asimilar todo lo que está pasando. Fabiola se queda en el apartamento de Javier y Jenny, ellos han sido de mucha ayuda tratan de mantener a Fabiola lo más alejada posible de nosotros. Aunque hay que admitir que no a sido fácil 3 días después apareció por la casa, pero solo se encontraba Marta quien no le permitió el paso.
Pero ella obviamente no se a quedado de brazos cruzados, mando abogados para que informaran que teníamos que desalojar su "propiedad" tenemos 1 semana para desalojar lo que es o era la casa de Nick y aunque el trate de negar que no le afecta se que si lo hace. Fabiola a vuelto a destruir lo poco que se a recuperado Nick desde su partida.
- Ven acuéstate conmigo - da unas palmadas en su cama -Tranquilo solo pasaba para ver cómo estabas- le sonrió - insisto - vuelve a dar unas palmadas a su lado, resignada camino hacia su cama y me dejó caer alado suyo -¿Qué haces?-miro su computadora donde habían unas fotos de unos planos - Te acuerdas la casa de la playa - yo asiento - quiero que la decoremos juntos -¿Enserio?- Lo miro a los ojos- el asiente -Vamos a vivir juntos y quiero que sea un ambiente cómodo para ambos- me enderezó en mi lado y le beso los labios- ¿eso porque? - se ríe - por pensar en mí y también por pensar en tí - le doy otro beso, me respondió el beso de inmediato, retiro la computadora de su regazo y este se sustituyo por mi cuerpo, y con sus brazos en mi cintura me acercó más a su cuerpo. Me separé un poco cuando nuestros pulmones pedían a grito aire pero antes de separarnos Nick atrapó mi labio inferior entre sus dientes, lo que hizo que soltará un gemido y me acercará más a su boca. Nuestras manos recorrían cada parte de nuestro cuerpo. Comos si de un arte se tratara, apreciando y disfrutando cada parte de nuestro cuerpo.
Me deshice de su camiseta tirando la en alguna parte de la habitación, Nick imitó mi acción quitándome la pijama y de una vez retirando su pantalón, mis senos quedaron expuesto a su mirada. Una onda de placer llegó a mi cuerpo cuando dirigió su boca a uno de mis senos
-Te necesito- fue lo único que pude decir cuando una de sus manos se dirigió a mi zona íntima
-Tus deseos son órdenes para mi- me susurró y a los segundos ya Nick me estaba penetrando. Al principio Nick no se movió solo se encontraba dentro de mi pero dando unas leves caricias en mi espalda desnuda, lo que me hizo dar a mi el siguiente paso. Me comencé a mover llevándolo más a mi interior, obligando a Nick a seguirme el ritmo - ¿Ya no duele?- yo solo niego. Entonces sus movimientos fueron aumentando al igual que mis gemidos.
Cuando ya habíamos llegado a nuestro punto final ambos nos tiramos en la cama uno alado del otro. Nuestras respiración se hiba calmando poco a poco.
-No sabes lo importante que eres para mi- me besó- Te quiero - esas palabras hicieron que mi corazón empezará a palpitar más rápido de lo normal- le sonrió -Yo también te quiero- esta ves yo lo beso.
Nick rodó hasta posicionarse arriba mío se introdujo de nuevo en mi obligandome a moverme, continuamos así hasta que nuestros cuerpos llegaron al climax
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.