El valor de un omega

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- No me hagas esto Sai |Sasuke estaba enrollado como niño pequeño en la pierna de Sai para que no siguiera avanzando|

- No te comportes como un niño |Dijo Sai dando pequeños pacitos por culpa de alguien que no le dejaba ir|

Había pasado dos semanas después del incidente del aroma. Sasuke no había estado en la casa en esas dos semanas, pero ahora él tenía que hacerse cargo del omega, mientras Sai pasaba su celo.

El problema era: Sasuke no se sentía capaz de estar con el omega ¿Acaso nadie de los que estaban alrededor suyo lo comprendía?

- Vamos Sasuke, solo es una semana...no tienes que ponerte en ese plan |Sasuke soltó la pierna de Sai y se paró|

- Soy consciente, pero...él ha mostrado signos de mejoría ¿no sería mejor ya llevarlo al hospital? |Sai puso la mano en la mejilla de Sasuke y con una sonrisa siniestra le dijo|

- ¿Quieres que te maten? Escucha...Inabi sigue desaparecido, además el abuelo Indra ya sabe de todo esto. No quiere se le revele ante la prensa |Dijo dolido, por equivocaciones de un alfa ahora el omega tenía que pagar| Sólo dale de comer y velo de vez en cuando, yo confió en ti.

- Pero....|En eso Sai corrió hacia la puerta y la cerro con fuerza| Maldito engendro |Susurro Sasuke enojado| Ojala que en tu celo te estimules tanto hasta dolerte el trasero

Sasuke se fue a su estudio, debido a las diversas interrupciones no había tenido el momento de escribir.

El iniciar una historia siempre se le hacía difícil, nunca sabía las palabras que serían correctas. A pesar de tener una imagen plasmada en la mente nunca podía iniciarla, a veces era mejor que esas ideas quedarán consigo mismo haciéndole compañía.

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Naruto

Estaba sentado en la cama, no había escuchado ruido después de que Sai-san se fuera. Se sentía un poco solitario y aburrido, aunque ya debería estar acostumbrado a eso ¿no?

Algo me carcomía el alma, y era el alfa que le estaba cuidando en ese momento. A veces sentía como le alejaba, pero otras se comportaba dulce con él. Cuando lo ayudo con su celo, me sentí importante, quería hacer algo por él ¿pero el qué?

Con gran esfuerzo me levante, al apoyar mi pierna derecha me retorcí de dolor. El morete que tenía todavía no había sanado y dolía, así que me apoye en la pared y pasos lentos avance hasta la puerta.

Abrí la puerta con cuidado, no había nadie en el pasillo y todo estaba en silencio ¿será que estoy solo y el alfa se fue? Algo en mí se sintió triste por ello.

Camine hasta el fondo del pasillo, ahí pude percibir un ligero ahora, el cual era de él. La puerta estaba medio abierta, así que podía verlo dormir plácidamente.

Abrí la puerta lentamente, y con paso delicado me fui acercando. Vi detalladamente su rostro al dormir, tenía ojeras, se miraba tan exhausto. Vi el armario que estaba a la parte izquierda de la habitación, avance y abrí el armario. Buscaba una cobija para que, al menos, el alfa no se resfríe.

Cuando por fin pude encontrar la sábana, volví a donde estaba él y con cuidado le puse la sábana. Lo mire un rato más, el cómo su respiración era pausada y lenta, estaba ligeramente pálido, sus rasgos eran un poco afeminados a pesar de ser un alfa. Quise tocarle su rostro pero me abstuve, no quería despertarle.

Camine lentamente hasta la salida, pero mis piernas me fallaron hasta dejarme caer. Caí encima de mi morete, lo cual hizo que gimiera de dolor. Sasuke se despertó en ese mismo momento y corrió hacía mí.