.•Attention•.

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15

El patio estaba inundado de estudiantes de nuevo ingreso, él, formaba parte de ellos. Con pasos emocionados caminó rápidamente hasta la gran pizarra donde se denominarían las clases, se clasificó en el 1-C, nada mal.

Fijo su vista a la pelirroja la cual hablaba animada con otra niña de cabello negro, miró su nombre, se sintió ofendida y se deprimió un poco al ver donde estaba.

1-B, esa era su clase, sentía querer llorar, no él, claro que no, ella.

Se había matando estudiando para ser la primera de la clase y estar en la primera para demostrarles a todos que ella podía hacerlo.

Teruhashi curiosamente terminó también en 1-C, quien lo diría, eso le pasa por querer aprenderse los nombres de todos sus compañeros para que al ingresar supieran que ella "nunca olvida a nadie". Se había quedado dormida a mitad del examen de ingreso.

Najimi se secó sus lágrimas rápidamente, y se fue furiosa de allí, tenía que buscar su salón para su primer día. Así que la siguió, obviamente.

Saiki:
_Hey, Najimi-San_

Sus pasos se detuvieron y giró su cuerpo observando a el pelirrosa, su gesto era aburrido y cansado, sus ojeras eran un poco notorias, solo un poco.

____:
_¿Qué sucede, Kusuo? ¿Te perdiste en tu primer día?_

Oh maldita mal agradecida, solo quería desearle los buenos días. Ahora ya no se las daría.

Porque con Najimi podía ser un humano normal.

Saiki:
_Que maleducada, solo quería darte los buenos días. _

La chica suspiró, luego sonrió, siempre era así de amable cuando a ella se refería, nunca sabrá el porqué de eso.

Inclinó su cabeza hacia él, y se le acercó para darle una bolsa, Saiki se había quedado quieto observando cada facción de ella, era una costumbre de hace ya casi once años.

No había cambiado demasiado en aspecto, seguía siendo la adorable y ruda niña quién mantenía a cualquiera que fuera con malas intenciones hacia ella, aunque ahora, se había aclarado las puntas de su largo cabello.

Su visión luego fue a aquella bolsa, era su típica bolsa de lienzo sin manijas, y ajustada con una cinta de color amarillo, color salmón con motas blancas, adentro estaba seguro que llevaba un almuerzo. Le había prometido que le llevaría un almuerzo preparado por sus manos, si no estaban en la misma clase, y que si era bueno y tenía tiempo, lo haría todos los días.

Caminaron juntos en silencio, los pasillos estaban repletos de alumnos, Najimi estaba nerviosa, quería causar buena impresión en aquel instituto académico.

Saiki sentía como los demás la observaban, las mujeres con ternura, y hablando enserio, ¿quién no? Si solía llevar unas medias rosadas con círculos blancos hasta las rodillas, dos bellas coletas infantiles además de que su rosado sonrojo adornaba sus mejillas pálidas. Era perfecta. Y los hombres... Mejor no lo diría, sus mentes estaban muy corrompidas para describir a su pequeña.

Llegaron al salón 1-B, ella solo se despidió de Kusuo con una de sus más bellas sonrisas, sin palabras, y fue a buscar un lugar; eligió sentarse al lado de una chica de cabello rubio, aunque era más amarillo exagerado, como un pato bebé. Ella era Raibaru Fumetsu, hasta hace unos años, solía pelear con ____ en primario porque solían competir en un club de karate en la cual Najimi le sacó el puesto de ser la mejor, aunque se arreglaron... Hace tres minutos, cuando se saludaron.

Seguio su camino, sería su primer año sin Najimi preguntándole por el lápiz que le robó hace ya casi dos años. Tras una disputa en la cual duraron un mes sin hablarse.

La pelirroja nunca sabrá que ese lápiz es su amuleto y que nunca se lo devolverá.

Todos estaban nerviosos por su primer día, a Saiki le daba igual, desde que quedó solo en el instituto, una mirada que lograba incomodar a cualquiera lo siguió, Ayano era la causante de esto. Pero al tocar el timbre de comienzo de clases, ella se fue corriendo a su aula que estaba doblando un no tan extenso pasillo.

Se sentía exhausto por alguna razón, si corazón se estrujaba y sentía ganas de querer gritar en una forma poco común de desahogo, su garganta dolía gracias al nudo que se le formó, trataba de respirar tranquilo, su mente le dolía y si seguía así, sus poderes saldrían de control.

[°°_Extraño a Saiki..._°°]

Se extrañaba por como lograba calmarlo con tres simples palabras que se supone no debería saber.

Porque ____ Najimi era su mejor amiga. Y nada, ni nadie, la separaría de su lado.

O... Eso supone él.