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CAPITULO VI

"La vida es como un bucle, no sabes a donde te llevara o en donde te encontraras. Vivirla a tu manera es la sensación mas placentera. Pero cuando consta del tiempo limitado puede llegar hacer como una bomba a punto de estallar."

El paisaje por la ventana era precioso, la pastura verde y los grandes arboles adornaban todo el camino. El sonido de los rieles, el traqueteo y el simple chuu chuu al llegar a una estación. Baje del tren cuando llego a la estación de Victoria, camine hacia la salida para tomar un taxi que me llevara a mi destino.

Eran alrededor de la una de la tarde y se supone que me encontraría con el a las doce, pero como era de esperarse Richard hace lo que se le pega la gana con nuestros horarios.

Las enormes puertas de cristal se abrieron al acercarme a ellas, sentí lo frio del aire por los climas que mantenían el lugar, por decirlo así, fresco. El sonido de mis tenis retumbar por el lugar hasta llegar a lo que era una recepción.

—Buenos días, María—salude a la chica detrás del gran mueble.

—Señorita Jazmín, pensé que no vendría—me contesto sin mirarme—la cita era a las doce—dejo de teclear en el ordenador frente a ella—¿Qué vamos a hacer contigo? —dijo burlona—pasa, te está esperando.

—muchas gracias—me despedí y caminé hasta el despacho de Henry.

Toque dos veces.

—adelante—oí detrás de la puerta.

Me abrí paso—Hola Henry—dije apenada.

—Tendré que cobrarte los honorarios que pierdo al darte mas de la hora Jazmín—se quito las gafas para reír.

—Eres un avaro.

—Parte de mi oficio—me indico que me sentara.

Henry era un doctor muy reconocido en Londres, tuve suerte en haberlo conocido en aquel tiempo. Ahora solemos ser buenos amigos y pues me ayuda en cierto problema.

—Y bien, ¿lo trajiste? —asentí.

—Hice todo lo que pediste.

—Bien, veamos ahora a que nos enfrentamos—abrió el sobre sacando una hoja doblada la cual analizo, mentiría si no esta nerviosa al ver como fruncía la frente y acariciaba su mandíbula.

—y bien...

—No son buenas noticias, el avance es muy grande—se recostó en su silla.

—¿Cuánto tiempo? —exhale.

—Es muy temprano para sacar suposiciones, el tratamiento que se está suministrando ya no funciona en este caso. Tendríamos que probar algo nuevo.

—¿cuál es el pero esta vez? —hable con tranquilidad.

—Dinero, el tratamiento es nuevo y por lo cual la suma es muy alta—me miro.

—entiendo.

—sigue al pie de la letra la alimentación que prescribí—pregunto serio.

—Se hace lo que se puede—comente mirando los lápices.

—Eso no es suficiente¸ si no sigue la prescripción la enfermedad avanzara más—dijo enojado.

—Conoces mi situación, para mi es casi imposible poder generar tanto. Ni siquiera con dos trabajos—contraataque.

Ambos nos dejamos caer en la silla, a veces pienso que hasta somos familia.

—veré que puedo hacer Jaz, por lo pronto que siga así. En cuanto tenga respuesta te la hare saber—sentí un poco aliviada, pero sin hacerme tantas ilusiones.

Salí de la oficina pasando por la recepción despidiéndome con la mano en el aire a María.

...🏠


Llegue a casa, ya era tarde pues la noche ya estaba entrando. Giré la llave en el picaporte, cerré la puerta detrás de mi una vez adentro. Tire mi bolso en el pequeño sofá. Estaba por ir a la cocina, pero un ruido proveniente de arriba llamo mi atención.

—¡Jimin! ¡eres tú! —grite desde abajo, pero al no ver respuesta tome el paraguas que se encontraba en la pequeña chimenea. Subí cuesta arriba aferrada al paraguas.

Camine silenciosamente, esperando algún movimiento o ruido. Abrí mi habitación, pero no había nada extraño, entonces un fuerte ruido me hizo sobresaltar. Sentía la bilis en mi garganta del susto que me lleve, camine hasta la nueva habitación de Jimin la cual se hallaba un poco abierta. Solo escuchaba el sonido de mi respiración y el latir de mi corazón. Abrí la puerta haciendo que la madera crujiera, entre con cautela y es que no podía creer lo que mis ojos captaban.

Todos los muebles y decoraciones estaban rotos, mas bien destrozados. El cuarto era un desastre como si un tornado hubiera pasado por aquí.

—Jimin—dije titiritando.

Entonces oí un gruñido detrás de mí.

¡AAAHHHHH!











Volvi, bebés.

Esperó les guste que se biene todo como la bighit jajaja

🌙SOLO ESTA NOCHE🌙 + PJDonde viven las historias. Descúbrelo ahora