//62 Kg\\ bc + yji (chanin)

Eighteen

– jamás pensé que diría esto, pero extrañé este colegio – habló cierto castaño oscuro mirando a su amigo

– same hyung – contestó un, ahora, colorado Felix logrando que Woojin soltara una risita – crees que los chicos se sorprenderán de vernos?

– claro que si! – exclamó sonriente – después de todo les dijimos que íbamos a llegar mañana – el mayor soltó una risita "malévola", la cual causó la risa de Felix. Woojin era tan adorable y tan lindo

Ambos amigos decidieron que iban a separarse para recorrer el colegio e iban a tratar de evadir a sus amigos si los veían para darles la sorpresa de que ellos estaban allí.

Woojin se fue corriendo hacia la cancha de fútbol y Felix ya tenía una idea del porqué; mientras tanto el australiano se fue hacia uno de sus lugares favoritos, la biblioteca. Puede parecer muy ñoño pero a él le encantaba ese lugar porque le hacía recordar a sus primeros días de clase, cuando era nuevo y ni entendía él coreano ahí fue cuando Minho le enseñó coreano y lo ayudó. Pero lastimosamente cuando él conoció a Chan y comenzó a hacerse amigo de él y su grupo; Minho dejó de ayudarlo y tratarlo bien ¿qué problema tenía Minho con Chan? ¿Y qué problema tenía Chan con Minho? Ambos eran dos amores de personas y eran tan agradables, pero cuando se trataba del otro se desconocían y se dañaban mutuamente.

Al llegar a la biblioteca el australiano mueve su cabeza, sacando de esta esos pensamientos y reemplazándolos por unos de felicidad al ver su tan preciado lugar. Pero el mayor para en seco al escuchar unos sollozos provenientes del aula de al lado, la cual era de música. Como todo buen chico de 17 años curioso que es decidió ir a ver de qué se trataba encontrándose con la sorpresa de que había un chico de cabellos azabaches hecho una bolita, llorando en una esquina del salón. Se veía fan chiquito e indeseado que a Felix se le partió el corazón, además sus labios se curvaron en una mueca triste.

– estás bien?– fue lo primero que salió de su boca – lo lamento, esa fue una pregunta de mierda – se apresuró a agregar rodando los ojos

El chico frente a él levantó la vista alarmado y asustado. Porque vamos, quien puede hablar tan profundo, ¿acaso era un demonio o algo por el estilo? Al observar al chico frente a él sus labios formaron una enorme "o". Ese colorado era un ángel; ¿él tenía esa voz? Por otro lado, Felix al verlo se dio cuenta que era uno de los amigos de Minho; ¿que le habrá pasado?

– oye...– lo llamó el australiano, haciendo que Changbin salga de su ensoñación

– uhm... lo siento– contestó con sus mejillas rojas el mayor

El australiano agarró la mayor confianza de su vida y se sentó junto a él. Estaba dispuesto a escucharlo

– sabes si quieres desahogarte acá estoy yo para escucharte – sonrío, mostrando su dentadura perfecta – vaya, eso rimo! – exclamó alegremente, haciendo que el azabache soltara una risita y Felix se descolocara porque esa risita había sido lo más hermoso que escucho

– como te llamas? – preguntó con su cabeza baja el mayor

– Felix y tu?

– Changbin

El australiano tomó la mano de Changbin y la estrechó en un fuerte apretón de manos. Ambos sintieron corrientes eléctricas recortes les el cuerpo, pero decidieron ignorarlo

– le hice daño a alguien – habló de repente el mayor – yo se que no soy una buena persona pero esta vez sé que me excedí y lastime a esa persona – dijo en un tono arrepentido el mayor – y todo por "amor"

Felix solo sobo su espalda y le sonrío comprensivamente

– todos cometemos errores sabes

Y dios, Changbin estaba seguro que estaba hablando con un ángel o alguna especie de ángel. Ese chico era tan lindo, pero no lo decía físicamente lo decía por lo que había visto de su personalidad y eso a Changbin le había parecido cursi. Pero lo que realmente hizo que sus mejillas se sonrojaran fueron ver esas pecas. Esas hermosas pecas que resaltaban con sus ojos brillantes, y se sermoneó a sí mismo cuando se encontró admirando las pecas del menor, mientras este le decía palabras de aliento y comprensión