Prt.5

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«Esto es...»

*
*
*

Pov. Eren
[...]

Estaba enfrente a la puerta del sótano.

El momento más esperado al fin había llegado. Tenía miedo pero no me importaba.

Mis padres no estaban, solo estaba yo en la casa.

Mis manos estaban temblando, suspiré y con decisión abrí la puerta.

El lugar está en total obscuridad, mi corazón empezó a latir rápido. Entre al sótano.

Un sonido extraño me puso en alerta, moví mi cabeza de un lado a otro buscando algo para alumbrar el lugar.

No encontré nada, trague en seco cuando un gruñido se escuchó en la habitación.

- ¿H-hola? - dije con la voz temblorosa.

Mis nervios se notaban más, mis manos sudaban y mi respiración era agitada. Tome la decisión de seguir investigando el lugar.

Camine a paso lento, no veía nada y tampoco escuchaba nada, me estaba alterando. Seguí caminando y me tropecé con algo y caí al suelo.

- ¡Mhg! - Me queje, luego escuché un sonido de cadenas arrastrarse. Algo se puso encima mío.

Sentí un cosquilleo en mi cuerpo, una respiración agitada chocaba en mi cuello. Algo viscoso calló en mi camisa y me levanté rápido. Un gruñido fuerte me asustó.

Salí corriendo del sótano, había olvidado cerrar la puerta, busque una linterna entre mis cosas y regrese al lugar.

Encendí la linterna y entre nuevamente.

Observe una mesa de metal que tenía cosas raras, había una cama que era similar a las de un hospital. Habían cosas extrañas en el sótano.

Cables, medicinas, jeringas y comida regada por todo el lugar.

Seguí caminando y encontré la cadena con la que me había tropezado.

Suspire y vi algo que me entristeció.

Había un animalito encadenado, estaba muy lastimado. Tenía vendas cubriendo sus patitas. El animalito tenía miedo.

Me acerqué con lentitud, mis manos dejaron de temblar y sonríe al ver la cara del animal. Reconci inmediatamente lo que era.

Un lobo.

Pero era un lobo distinto, se veía más joven. Su cuerpo es un poco pequeño, estaba delgado y mal cuidado. Su pelaje es de color blanco con combinación gris y negro. Sus ojos son de un color azul intenso.

Extendí mi mano y la acerque con cuidado, el lobo me miró y se volteo. No se qué fue pero me pareció algo lindo.

Me aleje y busque un interruptor, lo visualice y encendí la luz. Deje la linterna apagada y volví a dónde estaba el lobo.

Experimento A.L (COMPLETA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora