Nuevo comienzo
Emma Hamilton
Sonaba Blanco, de J Balvin en mis audífonos cuando me desperté del profundo sueño en el que estaba.
Estábamos entrando a Nueva York, después de 6 largos meses, nos mudamos. A fin de cuentas, creo que fue lo mejor.
Mi madre era la dueña de una gran empresa de ropa, "A&C", por lo cual, dinero no me faltaba.
-Emma, despiértate, llegamos a la nueva mansión.
-Eh? Que dijiste?
-Que me ayudes a desempacar porque llegamos.
Luego de ayudarla, fui a recorrer mi nueva casa.
Pasando la entrada se encontraba un gran salón, con hermosos dibujos en el suelo y unas grandes columnas que sostenían dos enormes escaleras que subían la piso de arriba. Todas las paredes eran de un tono beige con blanco, y estaban decoradas con muchísimos cuadros.
En el piso de abajo, a la derecha, había una hermosa cocina, con una bellísima guarda de rosas y girasoles que recorría toda la habitación. Pasando la cocina, había un living, y a su lado un comedor con una gran mesa. Al otro lado de la casa, en la izquierda, se podía encontrar un baño con un enorme espejo con bordes de cristal. Saliendo de este, a través de un pasillo, había una hermosa pileta climatizada, con todos sus bordes también de cristal.
En el piso de arriba, estaban las habitaciones. Eran 10 en total, todas con baño propio y vestidor, varias de ellas eran cuartos de huéspedes. Mi habitación era grande y era de un color azul pastel. Tenía varios muebles, un escritorio, unos estantes, un armario y una gran cama de dos plazas. Junto a la cama, habían unas largas puertas de vidrio, con unas cortinas blancas, que conducían a mi balcón.Horas más tarde, mi madre dijo que vayamos a recorrer la cuidad, para encontrar un instituto y una escuela de baile para mí.
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- Que dice ahí? OC?-Soltó Charlotte, mi madre, acaso es ciega esta mujer?
-DC mamá, DC-nose que significa-entraré a ver qué es.
Las paredes de afuera estaban cubiertas de grafitis, llamaban mucho la atención. Cuando entre, subí unas cortas escaleras y pase un pequeño salón con un gran espejo para llegar a la parte de la recepción. Era muy original, el "escritorio" de la chica era un auto antiguo todo grafiteado. Si, estaba segura de que era una academia de baile.
-Hola, disculpe, aquí enseñan baile?-le pregunté a la rubia.
-Si, tenemos varios estilos y distintos grupos y clases. Si te inscribes en las clases son US$10 al mes, y si te inscribes a los grupos son US$16 al mes.
-Me podrías explicar que son los grupos y las clases? Soy nueva en la cuidad.
-Las clases son abiertas a todos, se hace una coreografía por clase y puedes faltar cuando se te de la gana, en cambio, los grupos son cerrados y se hace un estilo en particular por cada uno, y no se puede faltar porque ensayan todo el año una solo coreografía para después ir a presentarse en competencias. La ventaja de los grupos es que tienen las clases gratis, pero para estar en uno hay que tener mucha responsabilidad.
Lo pensé un rato, yo amo bailar, siempre lo ame, voy desde pequeña, y me encanta la competencia. Decidido, voy a anotarme.
-Anóteme en los grupos porfavor.
-Genial, solo dime, en que grupos quieres estar?-comenzó a mostrarme una gran lista de diferentes estilos: reggaeton juvenil, hip hop juvenil, calle 22, DC group, novice, contemporáneo, infantiles, bachata y habies paar. Yo no entendí ni la mitad.
-Ehh, poneme en reggaeton y hip hop juvenil porfavor.
-Exelente, vení el lunes que viene y te explico tus horario y me das tus datos, soy Pipi.
-Muchas gracias, adiós-me caía muy bien esta chica-ah, por cierto, que significa DC?
-Dance Club (club de baile)-dijo y me giñó un ojo.
Cuando me di vuelta para salir, había varia gente bailando detras de mi. Me llamó mucho la atención en especial un chico morocho muy alto, parecia ser mayor de edad, estaba buenísimo. Lo siento bombón, debo irme.
Salí y le conté a mi madre lo que hablé con Pipi, le pareció bien y fuimos a casa.
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Ilegal
RomanceEmma Hamilton era solo una niña de 15 años, pero con mucha rebeldía, demasiada, se podría decir. El alcohol, sexo y drogas no son la excepción. Zac Matthews, un joven de 20, era todo un galán, y no le importaba nada, al menos, no hasta conocerla a e...