Ha pasado una semana desde lo ocurrido con Alexander, ninguno de los dos a mencionado ese tema. Me he vuelto mas amiga de Jack me a invitado varias veces después de clases a un parque que queda cerca de aquí, es un chico muy amable, un día me presento a su mama es adorable. Por otro lado Emma no me habla, he ido a sus ensayos varias veces para verla y apoyarla, pero ella no a ido a los míos, aun así sigue siendo mi amiga.
Le pregunte a Alexander que si sabia algo de porque ella estaba así conmigo, pero me dijo que no sabia nada, por otro lado él ha dejado el baloncesto porque se fracturo un brazo, siempre lo ayudo con lo que puedo, hoy es viernes y le voy a preguntar a Emma que porque esta así conmigo.
"Hey Emma" Me acerque a ella que estaba cogiendo su violín.
"Hola, queria pedirte perdón por lo del otro día ¿si?" Hizo un puchero, y me abrazó" De verdad lo siento mucho, es que aveces me altero, ya sabes"
"Esta bien, vamos a comernos un helado"
Nos juntamos con Jack y Alexander, y fuimos al lugar donde yo y Jack vamos todas las tardes después de clases, nos divertimos mucho, a Alexander se le hacia todo difícil debido a su brazo fracturado por ende tenia que darle todo en la boca como un niño pequeño. Pasaron las horas hasta que decidimos irnos a casa, Jack se fue con Emma ya que ella vive a unas cuadras de la casa de él, y yo me fui con Alex, pero caminado ya que él no puede conducir así.
En el camino Alex decía muchas cosas de porque no le gustaba tener un yeso en el brazo, ya que no puede darse placer entre otras cosas chistosas que él decía. Llegue a mi casa, le pregunte si se quería quedar pero me dijo que no, que va a cenar en casa de su madre.
Al entrar a casa veo a mi mama con los ojos rojos y a mi papa con el ceño fruncido. Me encaminé hasta las escaleras dispuesta a subir a mi habitación, pero mi papa me llamo, para que me reúna con ellos en la mesa.
"Hija, tengo algo que decirte" Mire a mi mamá y me mostró una débil sonrisa. "Tienes un hermano mayor que tu."
"!¿QUE?!" Grite asombrada, cubrí mi boca con mis manos mientras mis ojos se aguaban.
Esto era increíble, tengo un hermano mayor, siempre eh querido tener uno.
"Hola" Un chico rubio se acerco sonriendo, sus ojos se achinan cuando sonríe. Corrí y lo abrace.
Creo que debía estar enojada con mi papá, porque tuvo un hijo y nunca le hablo de él a mi mama ni a mi, pero es todo lo contrario estoy super feliz, ahora tendré a alguien con quien pasar el tiempo a parte de mis amigos. Lo abrace fuerte, y el tambien lo hizo, pequeñas lagrimas caían de mis ojos.
"Tenia muchas ganas de conocerte, pequeña" Nos sentamos en el sofá, el sostenía mi mano fuertemente. Comenzamos a platicar sobre que edad tenia, donde nació, su nombre.
Su madre se llama Marie era secretaria de papá, él es Matthew y tiene 23 años. Había pasado toda su infancia en Rochester Minnesota. Se enteró de que tenía una hermana cuando tenía 15 años, que escucho a papá hablar conmigo por llamada.
"Vamos al parque" lo inviste tomando su mano, él sonreía.
"Debes quitarte esa ropa, bebé" Caí en cuenta de que no me había quitado la ropa de hoy, le dije que volvía en unos minutos y fui a mi baño a darme una pequeña ducha y a cambiarme de ropa.
"¡Listo! Vámonos".
"A donde van?" Pregunto mi mamá.
"Vamos a por un helado" Sonreímos.
"Esta bien, no vuelvan muy tarde".
Caminamos hasta la heladería, él compro dos helados, uno de chocolate con almendras y el otro de vainilla y fresa.