Overlord Godsfall (Pausada)

Capitulo 21: El cielo es el unico limite (La tendencia de ascenso de Nazarick)

Al despedirse de todas las leyes de la física, Momonga pensó que sabía que la Gran Tumba de Nazarick flotaba hacia el cielo, llevada por lo imposible.

Verlo fue tanto que Momonga apenas podía creerlo, ni siquiera después de que Herohero lo hubiera explicado, ni siquiera después de verlo por sí mismo. El pedazo de tierra sobre el cual estaba situada la Gran Tumba ascendía lenta pero seguramente, su forma estaba envuelta por grandes nubes hinchadas y lentamente se llevaba su amada base del gremio.

Fue tan impactante para el pobre subconsciente de Suzuki Satoru dentro de la mente del gran Dios Momonga que inicialmente cayó de rodillas, con las mandíbulas del cráneo hacia abajo y sus manos levantadas hacia el cielo, como si pudiera evitar que el evento ocurriera. , podría evitar que Nazarick volviera a flotar lejos de él, siempre fuera de su alcance. Lo había vuelto completamente ciego y olvidadizo de varias cosas, incluido el hecho de que cosas como la magia ciertamente existían aquí.

"Momonga-san, ¿estás bien?"

"-aaaahhhhh-Eh? Oh, cierto, Herohero-san". Su compañero del gremio apareció a la vista, con Solution Epsilon detrás.

"Fue un shock bastante grande", dijo el slimo negro. "Cuando entré por la puerta, y luego sentí que me estaba cayendo, inicialmente pensé que me estabas jugando una broma, Momonga-san. Caí directamente en este cráter aquí. Solo me di cuenta de que algo andaba mal después de atraparme y Solución fuera de él ".

"Huh" La NPC rubia que parecía una criada estaba en silencio como siempre. Momonga miró hacia abajo y confirmó la presencia del enorme cráter justo debajo. Le tomó un segundo, pero él juntó dos y dos. El tamaño del agujero se ajusta a la forma y tamaño de la masa de tierra flotante de arriba. "Espera, ¿no estaba todavía adjunto?" Recordó que antes de que vinieran al "rescate" de Peroroncino, el cráter había estado allí, y Nazarick había estado balanceándose en un pedazo de tierra delgado con forma de pilar. Por lo general, uno pensaría que si el pilar de aspecto frágil se rompiera, entonces Nazarick simplemente se hundiría en el cráter; en cambio, inexplicablemente flotaba, como un globo desechado.
Pensar en ello hizo que su cerebro inexistente doliera, pero logró calmarse de su pánico inicial. Algo que Herohero había dicho también lo hizo recordar algo.

"Perdóname, Herohero-san, pero me teletransportaré hasta Nazarick. Quiero ver si todo está bien".

"Muy bien", dijo Herohero, su cuerpo ondeando como si se estuviera encogiendo de hombros.

"Tu llamada, Momonga-san".

Esta vez, Momonga no abrió una Puerta: fue un hechizo de teletransportación directa a Nazarick.

Exigía marcar un lugar como ancla antes, pero Momonga había sido lo suficientemente prudente como para hacer eso desde que llegaron a Nazarick de este mundo, incluso antes de conocer a Sebas y Nemu. Fue una de esas cosas subconscientes que hizo incluso sin tener que pensar en ello.

Llegó a la entrada de los pisos inferiores, que estaba tan vacía como recordaba. Salió a la entrada de la Tumba, que estaba expuesta al mundo exterior. Allí, sintió algo diferente: una ráfaga de aire azotó su capa. Parecía que el área estaba siendo sacudida por una brisa muy fuerte. Y luego, por supuesto, notó que los alrededores no eran más del bosque, sino de un mar azul interminable.

Momonga caminó rápidamente hacia las afueras de Nazarick, hasta el punto donde su cuerpo se unía con el suelo flotante. Se enfrentó a los fuertes vientos que amenazaban con volarlo, y luego se acercó al borde. Bajó la vista.

Una gran extensión de bosque se extendía justo debajo. Y allí, todo el camino, estaba el cráter distante que acababa de dejar, ahora una forma del tamaño de una bola de boliche en su visión.