Jung Seokjin, el hermano mayor de Hoseok, era como el mejor amigo de la pareja. Ambos querían mucho a Seokjin. El siempre les daba apoyo, y los consolaba, al igual que siempre jugaban videojuegos y comían la deliciosa comida que el preparaba. A Hoseok le daba tristeza el hecho de que Seokjin estuviera solo. El era perfecto: lindo, amable, gracioso, buen chef. Pero no podía encontrar el verdadero amor.
Ese día, en el cual, Hoseok y Yoongi veían una serie romántica que le gustaba al menor, sonó el timbre.
Yoongi se levantó y fue a abrir. Al ver que era Seokjin, sonrió, e iba a decir algo, pero Seokjin puso su dedo en sus labios, y le susurró a Yoongi.—voy a asustarlo, cállate y no digas nada.—Yoongi asintió sonriendo. Se acercaron lentamente a la habitación, y Seokjin abrió de golpe. Hoseok estalló en carcajadas. ¿Porqué? Seokjin llevaba unos pantalones en la cabeza, y un poleron en las piernas. Hoseok no podía parar de reír. Eso les decía a los tres, que sería un lindo día de juegos y risas. Si no fuera por que...