Cuándo tengamos que vernos

Yo te había visto antes

Yo te había visto antes, mucho antes de lo que pensé ¿Sabías eso?. Yo lo recordé hace poco.
Todo comenzó hace ya bastantes años, casi 16 para ser exactos, yo había ingresado a secundaria y al ser hija única no tenía muchas habilidades para entablar conversación o hacer amigos, era un poco regordeta y rara, en verdad cuando miro mis fotos, creo que la edad me ayudó un poco.

La secundaria a la que asistía estaba en la ciudad, a 1 hora aproximadamente de mi pequeño pueblito perdido entre árboles y la mayoría de los alumnos eran de la cuidad.

Asi que añadan un punto menos a mí favor "pueblerina" como solían llamar a los foráneos; aunque nunca me importo, yo iba ahí a estudiar no a hacer amigos. Eso es lo que siempre me repitió uno de los dos hombres que más he amado en la vida, mi señor padre, así que llegue ahí con la meta en mi mente y a eso me dedique estudiar y estudiar.

solo una amiga me acompaño en esos parajes oscuros de la secundaria, su nombre Alma.

Ella era bajita, también algo llenita, con una capacidad tremenda de incluir por lo menos una mala palabra o grosería en casi todas sus pláticas; aunque el modo de decirlas era gracioso, no teníamos mucho de que presumir en esa etapa francamente y pasábamos los días tratando de sobrevivir a la horrible secundaria, siendo un par de matadas mas.

Así pasaron los días,meses, años; pasamos a segundo grado, alma conoció a una chica por su club de música, también era un poco rechazada, así que nos veíamos en el receso para comer y tontear un rato. Su nombre era Denis, ella estaba locamente enamorada, casi obsesionada de un joven saxofonista de su club de música y cada que este chico pasaba enloquecía. En verdad era todo un espectáculo gritaba, nos jaloneaba y luego suspiraba para terminar con su ya conocida frase "no es un angel".
Pues la verdad a mi no me lo pareció ese chico era muy común la verdad, lo que alma siempre resaltaba de el era que tenía un talento tremendo para la música.
Así nos pasamos el resto de ese año escuchando sus historias, de como el le pasaba el lápiz, o como le dijo que su suéter se había caído jaja, todo un show digno de verse.

Hasta ahí, en esos años jamás pensé en eso otra vez, curse mi tercer año de secundaria sobreviviendo a ser matada en el salón, poco vista y a la sombra de las lindas chicas que salían con el niño lindo del salón, así paso mi secundaria, sin pena ni gloria, con altas calificaciones pero nula vida social.

Alma y yo presentamos examen para la misma preparatoria; así que todo estaría bien, al menos una cosa seguía constante en mi vida, mi amiga seguiría a mi lado y eso estaba bien.

Me propuse perder peso y entre a un equipo de baloncesto, me ayudó bastante ya que sin darme cuenta perdí esos kilos que me sobraban, en fin nueva etapa, nueva chica pensé.

Como era de suponerse ingresamos, (Dios gracias por eso) llegó el primer día, mi madre y mi padre emocionados, despertaron temprano para desayunar juntos y luego llevarme a mi primer día de clases, jaja ya se es lo que todo adolescente desea ¿no?, llegar a preparatoria con sus padres; aunque sinceramente a mí me daba tranquilidad. Ya les conté de mis nulas capacidades sociales, así que me calmaba un poco que estuvieran allí.

Preparé mi uniforme; falda, suéter, chaleco,camisa con moño y calcetas altas con zapatos negros; genial me confundiría con todas las demás deseo cumplido.
Llegamos  a la escuela eso parecía aterrador, chicos y chicas mayores por todas partes, algunos hasta con barba, jamás había visto un chico con barba porque, osea venía de secundaria, pues bien me dispuse a entrar y no tropezar o chocar con la reja de entrada
( dato perturbador #1 cuando estoy nerviosa, no calculo bien velocidad y espacio así que choco con las cosas puertas,muebles y variedades ).

Entré tranquilamente y me dispuse a buscar el salón donde nos darían una especie de presentación; ya saben en donde están los salones, la cafetería, los baños, etcétera.