MUTE 沉默的 JELSA

「 initiation 」

-Yo le respondí que sí. Ah, desearía haber tenido una cámara en mano en esos momentos. - había dicho Rapunzel ilusionada.

El grupo de amigos se encontraba en la cafetería, el receso había iniciado por lo que ahora degustaban sus alimentos bajo una plática amena.

Jack no ponía atención, con su tenedor revolvía los trozos de puré de su plato. No tenía apetito.

Eugene se dió cuenta de eso y se alejó de su novia para sentarse junto a Jack.

-Amigo, ¿Que te sucede? -

Para suerte de Jack, los chicos seguían charlando sin prestarles atención, no estaba de humor como para que sus amigos lo llenen de preguntas sobre su estado.

-Nada Eugene. Solo no tengo hambre. - Mintió.

-Conozco esa excusa Frost, algo te ocurre.

Jack sonrió, pero volvió a su seria expresión.

-Es solo que... Ella me sigue ignorando.

Eugene entendió a que se refería, sabía que su amigo sentía atracción por una chica de su salón, pero nunca les confesó quién era esa persona. El moreno sentía curiosidad por saber quien era esa persona que tenia en ese estado a su amigo. Jack era una persona un tanto reservada en el término amoroso.

-Oh... Te recomiendo que sigas intentando. Entiendo que no seas guapo como yo, pero esa chica tiene que descubrir algun defecto tuyo que la enamore.

Jack rodó los ojos ante ese "halago"

-Gracias por lo de feo, me sirvió mucho tu explicación - Respondió burlón.

Se puso de pie bajo la atenta mirada de Eugene.

-¿A donde vas ahora?

-Iré a buscarla. - Dijo sin más.

Depositó la bandeja aún con puré en su lugar correspondiente y empezó a correr por los pasillos. Los estudiantes que pasaban por ahi se quejaban por los empujones que Jack les daba al pasar a su lado. El peliblanco los ignoró y giró para dar con otro pasillo, afortunadamente estaba vacio por lo que podia correr sin problemas. Sentia su respiracion acelerarse y gotitas de sudor caer por su frente, estaba exahusto. Se detuvo para colocar sus manos en sus rodillas mientras se calmaba.

Se reincorporo y siguio corriendo, pudo ver de lejos las escaleras que daban al segundo piso del instituto, al llegar ahí las subio y dió con otro pasillo, vacio tambien.

Llego hasta el final, donde habia un aula, pudo ver atraves de la ventana que estaba vacia, entro al salon y notó un bulto en la esquina al fondo.
Ahí estaba ella.

La chica estaba demasiado ocupada leyendo un libro, y con los audifonos reproduciendo a sus cantantes favoritos Lifehouse, Frost se sentía acosador al haber investigado cosas de ella, sabia que tenia una hermana menor, vivia con sus padres, era la mejor en su clase, y su mejor amiga era tambien amiga de Jack.

No queria que la chica se asustase con su acoso, lo unico que queria era saber mas de ella, conocerla, y tal vez en un futuro hacerla su esposa, por que si, Jack estaba enamorado de ella. Las veces que podia acercarse a ella (ya que era casi imposible por las dos personas que siempre estaban con ella, la loca pelirroja y el asiatico que le clavaba cuchillos por los ojos) Jack balbuceaba con torpeza y no podia formular palabras por miedo a que la chica no lo quiera, pero era lo contrario, la platinada solo oprimia sus labios color rosa palido, y se encogia de hombros agitandose, como si estuviera riendo. Jack era lo suficientemente torpe como para no darse cuenta que significaba ese gesto.

Por eso, al no recibir una palabra suya, Jack sentia que la platinada lo ignoraba. Algunas veces cuando se encontraban en la cafeteria, la chica de bellos ojos azules, se daba la vuelta y se alejaba de el con rapidez, como si no quisiera tenerlo cerca.

A Jack le dolia su rechazo.

Pero ahora, la chica estaba sola, sin sus amigos junto a ella, era su oportunidad y debia aprovecharla, podria hablar con ella sin ponerse nervioso, y sin las miradas de los demas.

Suspiro, acomodo su cabello y sin pensarlo, entró al aula.

La platinada se extrañó al escuchar el ruido de la puerta cerrarse, ¿Por qué entraban si aun no terminaba el receso? Tal vez solo venian a dejar sus bolsos. Levantó la mirada mientras se quitaba los audifonos, se sorprendio al ver a un peliblanco caminando hacia su fila. Guardó su celular y caminó para salir del aula pero al pasar a su lado el chico la tomo de la mano sutilmente.

-¡Perdón! - Exclamó avergonzado, liberando su mano - Ah... Yo solo quiero hablar contigo.

La platinada miró a los lados buscando una salida, el peliblanco bloqueaba su camino, miro a los pupitres a su lado, facilmente podria brincarlos hasta llegar a la ultima fila que daba a la puerta.

-¡Por favor no te vayas! - musitó desesperado.

La platinada solo se encogio de hombros y regreso a su asiento, trato de ocultar su rostro con su cabello, torpemente recordó que lo habia amarrado, maldita sea... Jack iba a ver su feo sonrojo.

Jack sonrió ampliamente, moviendo el banco mas cercano para colocarlo junto a ella.

-Huh... Elsa. Tu me gustas.

Elsa solo lo miraba sorprendida, sus mejillas se sonrojaron y quiso responderle, fallando en el intento por el profundo dolor en su garganta, le dieron ganas de llorar en ese momento.

-¿Que ocurre, te duele la garganta? - preguntó preocupado.

Elsa negó con la cabeza timidamente.

-Bien, continuo. - siguio - Me haz gustado desde que me inscribieron aquí, y quisiera que aceptaras salir comigo. He intentado llamar tu atencion de varias formas, y me sentia mal por que solo me ignorabas y no me hablabas.

La platinada bajo la mirada.

-¿Estás bien? - preguntó. - Perdoname, creo que estos siendo demasiado rapido, no quiero que te asustes, lo siento mucho.

Jack vió como la chica sacaba su movil del bolsillo de su sudadera azul palido. Con sus delgados y suaves dedos, tecleó el aparato y se lo tendió al peliblanco, quien lo leyo con detenimiento.

"Perdoname por no hablarte, no quise que te sintieras mal de ninguna forma. Soy muda"

Quiero terminarla rápido así que no esperaré más
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