My sister says she doesn't like the way you wear your hair

884 60 17
                                    

Louis admiraba al pequeño junto a él, no había sol entrando por la ventana para iluminar la bellísima cara de su amante como en las novelas románticas pero eso no hacía menos hermoso a Harry, su belleza no dependía de la luz porque incluso en la oscuridad podía verlo brillar. Su piel suave y blanquecina le brindaba un calor incomparable, no era su edad o sus problemas, era solo Harry, dormido o despierto, envuelto en sus sabanas o en sus brazos.

Se sentía culpable, porque para él si pesaba la edad, pensaba que en determinado momento Harry encontraría alguien más joven, que le diera más cosas que le ofreciera un futuro y no es que él no pensara en un futuro con Harry pero lo veía lejano.

Se sentía egoísta por no resistir a la cercanía del menor aunque eso le causara problemas al pequeño, había sufrido tanto durante todos esos días que no estuvo con Harry y ni el pequeño imaginaba cuanto.

Ahí entre la cama, las sabanas y su pequeño desnudo y dormido, Louis decidió que lucharía hasta el último segundo de su vida por estar con Harry aunque eso le saliera caro, porque por Harry era capaz hasta de sacrificar su propia libertad.

Eran las siete de la mañana y sabía que estaban en grandes problemas porque Harry no llegó a su casa, nada de esto saldría bien. Con cuidado fue moviendo el cuerpo de su amado niño mientras repartía besos sobre todo su rostro.

— Amor, levántate tenemos que ir a tu casa.

Harry hacía ruidos extraños en un intento por seguir durmiendo y eso causó la risa de Louis.

— Anda bebé es hora.

Harry fue despertando y se abrazó al cuello de Louis como pudo. Estaba tan enamorado.

A pesar de la edad, Louis se veía tan joven incluso con barba, y las arrugas debajo de sus ojos que solo podían verse cuando sonreía. Harry lo amaba sin importar qué.

Se tocaban mutuamente con temor a romperse, sabían que debían disfrutar cada segundo juntos porque no les quedaba mucho.

Luego de varios minutos en silencio decidieron salir de la cama y tomar un baño juntos, era la primera vez que eso sucedía así que Harry le rogó solo un poco a Louis para poder bañarse en la tina y no en la regadera.

— Solo buscas en que malgastar el tiempo para no llegar a casa —le dijo Louis mientras tallaba de manera amorosa sus rizos húmedos.

Harry en medio de ambas piernas del mayor se cruzó de brazos fingiendo estar ofendido— ¿insinúas que bañarnos juntos es una perdida de tiempo, Tomlinson?

— No, amor, pero se lo que estás haciendo.

Harry decidió vengarse así que comenzó a mover las caderas en círculos y restregarse contra el cuerpo de Louis.

— Oh no no, bebé, no lo harás —le advirtió el castaño antes de pellizcar la piel de sus glúteos por debajo del agua—. Ya niño travieso es mejor que terminemos para ir a dejarte a tu casa.

A Harry no le gustó la idea pero se resignó no sin antes darle un beso.

Terminaron de arreglarse entre besos y bromas, Harry tuvo que aceptar un par de bóxers de Louis debido a que los suyos yacían sucios debajo de la cama y una camisa porque no encontraba la suya. Louis amaba verle alguna prenda suya.

Al ojiverde le dio melancolía dejar la casa de Louis, sobre todo porque sabía que no volvería, esperaba que no fuera así pero él sabía lo que había hecho mal y también sabía que estaban en problemas, Louis sufriría por su culpa y eso era lo que más le dolía.

Ambos iban tomados de las manos dentro del carro de Louis, el silencio era su mejor aliado en esos momentos. Se amaban y no era necesario escucharlo del otro, el roce de sus dedos lo gritaba.

They Just Don't Know You [Larry Stylinson]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora