Arthur, ¿Verdad o reto? [Merthur]

Destino

Ya todos se habían ido.

Luego del beso entre Arthur y Merlín, todos se sintieron incómodos, como si fueran la tercera e innecesaria rueda, aunque había más de 5 innecesarias ruedas.

Pasaron unas pocas rondas más del juego antes de que finalmente se fueran, pero se podía sentir la tensión en el ambiente. Y no hablo solo de la incomodidad, sino de la tensión sexual que se podía respirar entre los dos que antes se habían besado. Todos habían visto la mirada que el rubio y el moreno compartieron al romper el beso, y aquella pregunta que parecía incitar a algo más, que parecía ser una invitación, una invitación a todos para que se fueran y los dejaran solos. Cosa que sucedió, pues poco a poco cada uno fue poniendo una excusa para poder irse, hasta que finalmente rey y hechicero quedaron a solas, en un silencio aterrador para cualquiera.

Ninguno sabía que decir. Habían cruzado una puerta que no debían cruzar, que estaba tapada con maderas y clavos, sellando un lugar en donde sentimientos familiares, pero lejanos a la vez, se hallaban, buscando escapar a toda prisa, y ese beso había sido como destrozar la puerta con un hacha.

Finalmente, el fino muro que separaba la amistad de algo más había sido derrumbado, y ninguno de los dos sabía para donde ir, pues el otro lado del muro era terreno nunca explorado, desconocido, y terrorífico. O al menos así era antes del beso, pues este había despertado en ambos más que solo sentimientos que trataban de ocultarse.

Merlín quiere decir algo, pero las palabras quedan atoradas en su garganta y pronto se olvida de que era exactamente lo que iba a decir. Y pensó en retirarse, cuando la voz de Arthur se escucha, por lo que decide quedarse.

―Merlín... ―el nombrado se mantiene en silencio, expectante, y el rubio se arrepiente de lo que iba a decir, por lo que cambia sus anteriores palabras― Finalmente recibiste un buen beso, apuesto a que antes no sabías como se sentía, ¿Cierto? ― "cobarde", es la palabra que parece grabarse a fuego lento en su cerebro tras decir lo que dijo.

La mirada del moreno le hace darse cuenta de que metió la pata hasta el centro de la tierra, y probablemente incluso la había atravesado.

Lo observó levantarse y darle la espalda. El pánico se apoderó del rubio.

―Me voy. ―proclamó, dirigiéndose a la puerta, y antes de llegar a esta, siente su brazo siendo sujetado y su cintura abrazada, se gira un poco, y antes de poder decir nada, unos recién explorados labios se posan sobre los suyos.

Su primer instinto fue alejarse, pero el brazo en su cintura lo abrazó con más fuerza, y Merlín era muy débil como para no dejarse llevar por los labios de Arthur. Labios que extrañó durante mucho tiempo. Así es como cierra sus ojos, y deja que sus brazos rodeen su cuello, demostrando que no quería separarse por nada del mundo. Sabe que Arthur no quiso decir lo que dijo, solo por la fuerza con que lo abraza, porque lo conoce lo suficiente como para saberlo.

―Merlín, lo sien... ―el nombrado lo vuelve a besar impidiéndole terminar su frase, porque ahora lo que quería no eran unas disculpas, sino los labios del rubio sobre los suyos.

―No digas nada... ―pidió, separándose lentamente― Porque seguro metes la pata de vuelta. ―se mofa, y Arthur se siente indignado, pero es un sentimiento que queda en segundo plano, porque finalmente puede abrazar la cintura de Merlín, porque finalmente puede besar sus labios hasta que ambos se cansen, después de tanto tiempo de espera.

―Estoy seguro de que el rey soy yo, no tu. Así que no me digas que hacer. ―dice burlón el rubio, que puede observar los ojos de su hechicero abriéndose cuales platos por la sorpresa.

― ¿Lo... Lo recuerdas?

―Desde que me besaste. Supongo que pasaron muchos años y extrañaba la sensación. ―y sabía que incluso antes de haber besado a Merlín, anhelaba poder besarlo, romper la barrera que decía "solo amigos". Claro, nunca esperó que, al finalmente besarlo, las memorias de vidas pasadas llegaran a él como un baldazo de agua fría, que le hizo entender a su yo de esta vida que lo que sentía por Merlín no era algo pasajero, era un amor infinito, uno que persistía a pesar de los años, que estaba destinado a ser tarde o temprano.

El rostro del hechicero se torna de un color rojo intenso, pero pronto una sonrisa surca su rostro, y sus ojos se iluminan. Otra de las tantas cosas que Arthur había extrañado.

―También lo extrañe, su alteza. ―dice con cierta diversión― Tardo mucho tiempo en recordarlo.

―Bueno, si me hubieras besado antes...

― ¿Se suponía que yo tenía que saber que recordarías si te besaba?

―Tu eres el sabio hechicero, no yo.

Ambos ríen, felices por el reencuentro, felices porque ya no tenían que pelear, porque ahora podían vivir su vida juntos, sin magia, sin destinos, sin criaturas horrendas, sin sufrimiento. Ahora podían dedicarse a amar al otro, hasta que tuvieran arrugas y necesitaran bastones para caminar.

Y las palabras sobran, porque ambos con solo mirar los ojos del otro saben exactamente lo que piensa y lo que siente.

Decir "te amo" no era más que una obviedad, que prefirieron demostrar en un nuevo beso, cargado de sentimientos y nostalgia.

― ¿Sabes, Merlín? ―murmura suavemente el rubio, separando sus labios un poco, observando los ojos del mas bajo observarle con curiosidad, y cierta molestia, porque haya roto el beso― Hay otra cosa que extraño.

Merlín enarca una ceja, esperando la respuesta.

―Escucharte gemir mi nombre.

Y el moreno solo puede colorearse como un tomate.

Parece que si había un destino en ese momento, y no era exactamente una heroica pelea. Aunque, tenía su parecido, pues alguien iba a ser apuñalado.

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N/A: Bueno, finalmente después de tanto tiempo, me digné a hacer la segunda parte de este originalmente one-shot. Lo tenía desde hace una semana pero por falta de internet no podía subirlo. No pienso hacer una tercera parte, pero a lo mejor, si mi mente tiene la inspiración e imaginación para ello, haga otro one-shot de estos dos.

Creo que nunca me rogaron tanto que haga una segunda parte de algo como de este one-shot, cosa que realmente me sorprendió, pues esperaba que fuera poco leído, y es de mis one-shot con más vistas y votos, ¡Por lo que se los agradezco enormemente! Muchas gracias por el apoyo.

Sin más, espero que les haya gustado esta segunda parte.

Atte. Liam.