capitulo 3

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Recorrí el lugar hasta encontrarme con una caja  que decía " deja tu regalo  para el gran cumpleañero Ricky"  decorado con varios globos, reí por lo bajo esto es típico de el  y así se dice ser un chico grande,  deje mi regalo en ese lugar y me dirigí a la barra  para tomar una cerveza.

me sentí aun mas tonto al tener que fingir mi voz por la de una mujer para que no me descubran, aunque no fue muy difícil,  extrañamente mi voz era  muy fina y  había mucho ruido como para que me escucharan bien

pasado las once de  la noche me sentí muy mariado creo que había tomado demasiado, no recuerdo  muy bien que tanto fue que tome,  pero creó que fue  suficiente como para encontrarme bailando con un hombre vestido de alguno de los príncipes de  Disney admito que se miraba muy guapo, aunque no lo suficiente para llamar mi atención

hice una mueca algo graciosa de asco al pensar la que este chico era guapo, nunca me han llamado la atención los hombres y que este vestido de mujer  no cambiara las cosas

luego de terminar de bailar me dirigí al segundo piso de este lugar y divisé   a una chica vestida de superman, sin duda era mi hermana, acompañada de una hermosa princesa de largo cabello llamada Danna.

–hey – dije para llamar su atención –  no deberían estar abajo donde se encuentra la diversión

–para que, si desde aquí podemos observar el gran show  que esta dando Ricky –mi hermana señalo hasta la barra donde se encontraba Ricky vestido de Thor bailando,  y mucha gente le aplaudía, es un tonto , no tiene vergüenza de nada

–vamos hay que seguir divirtiendo nos – grito Danna jalando de la mano a mi hermana  hacia las escaleras – nos vemos luego –me dijo con una sonrisa, ellas también estuvieron bebiendo, lo pude notar  por que su voz  sonaba diferente a la  normal, además Danna no es de las personas que grita cuando hay mucha gente, ella es mas reservada

camine por el pasillo en busca de un lugar en donde  respirar aire puro, he tenido suerte hasta el momento de no encontrarme con ninguno de mis amigos, seria muy vergonzoso que me vieran vestido así de esta manera

por este lugar solo se miraba adolecentes borrachos, parejas besándose, y alguno que otro durmiendo y eso que aun era temprano.

después de un largo  recorrido encontré un balcón, observe el cielo había varias estrellas y una media luna, todo parecía estar tan calmado que hasta me asustaba, suelen pasarme cosas raras cuando las cosas están así.

como en mi cumpleaños numero diez, todo era paz y tranquilidad, rizas iban y venían, hasta justo antes de terminarse la fiesta  cuando estaba abriendo mi ultimo regalo, estuve a punto de proclamarla como la mejor de todas las fiesta de cumpleaños, pero claro alguien tenia que arruinarla, lamentablemente nunca supe quien fue el de la gran idea de regalarme una araña de goma, siempre les tuve miedo a esos bichos y así fuera de mentiras me mantuvo despierto toda la noche a mi y a mis padres

siempre  que cosas buenas me pasan, algo malo le sigue, y esto ya a sido demasiado bueno por el echó de que nadie me aya descubierto.

sentí el aire frío chocar  con mi piel, temblé levemente y me gire para ir adentro  ya falta poco para la hora de irnos,  sentí mi cuerpo chocar con el de alguien mas y antes de caer al suelo unos fuertes brazos me atraparon rodeando mi cintura

–lo siento –hable con un tono agitado por el repentino suceso

– ¿esta bien? –me cuestiono   la persona a mi lado que vestía un traje de batman, su voz era  gruesa  pero    su tono preocupado  la hacia parecer muy dulce, o eso me pareció a mi,  creo que he tomado demasiado
  
asentí con mi cabeza,  a través de la poca luz pude distinguir unos ojos oscuros observarme  detenidamente,  su mirada no era intimidante, pero me hacia sentir nervioso y esto es muy complicado de lograr en mi

no se en que momento  mis ojos también, empezaron a recorrer cada parte de su cuerpo, era  mucho mas alto que  yo y sin dudar este traje le quedada demasiado bien, la luz no me permitió ver mas aparte de    sus labios, ni yo se como termine con la mirada fija en sus labios que se miraban realmente provocativos.

sus brazos continuaban en mi cintura, nuestras miradas se encontraron y todo a mi alrededor pareció suceder en cámara lenta,   pude percibir su rostro acercándose lenta y peligrosamente, pero no me aleje, sentí sus labios hacer presión sobre los mios,  mi corazón se acelero repentinamente a tal altura que parecía que saldría de mi pecho

pude alejarme pero, no lo hice sus labios parecían encajar a la perfección con los mios, fue un beso lento, sin darme cuenta mis labios se movieron correspondiendo  a aquel raro beso

lo que nos obligó a separarnos fue la falta de aire, el llevo una mano a su rostro y se quitó el antifaz   dejando  al descubierto su identidad, su rostro  era el de un chico, sentí mi presión bajar  y mi respiración entre cortarse  al darme cuenta de  que acababa de ¡besar a un chico!

–lo siento, esto no es algo que tenia planeado –dijo con una sonrisa avergonzada, y por primera vez en mucho tiempo  sentí la necesidad de desaparecer y huir de esta situación y eso que yo nunca me considere un cobarde

me encontraba sin palabras, así que hice  lo mas ridículo que  yo Alexander Maxwell  pensaría  hacer .... salir corriendo sin mirar atrás

al llegar cerca de las gradas revise mi reloj y ya era media noche seguro Danna y Camila ya me están esperando

Esto parecía como el cuento de la cenicienta, huyendo a media noche solo que  este cuento se llamaría el ceniciento.

DisfrazadosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora