capitulo 12

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-deja ese celular - recrimino Daniel por décima vez - parece que estuviera solo - se quejó y poso su mirada en mi negando con la cabeza

-No te quejes tanto, prácticamente fui arrastrado hasta tu casa, conformate con tan solo mi presencia - respondió Sam sin despegar la vista de su celular

Nos encontrábamos en casa de Daniel, ya que mi amigo solicitaba con urgencia mi presencia simplemente por el hecho de que sus tíos habían salido de la ciudad y se quedaría solo en casa, el muy cobarde no le agradaba la idea de quedarse solo y llamo a mi mamá para suplicarle que me dejara ir a su casa, valiéndose de chantajes baratos convenció a mi madre de que me dejara pasar la noche aquí, y Sam, en realidad no se como fue que termino en esta casa, pero no creo que haya venido por voluntad propia.

Por petición del dueño de casa nos encontrábamos mirando una película, en la sala, eran aproximadamente las nueve de la noche y la película iba por la mitad, creo. Desde el momento en que empezó la película Sam le había dedicado toda su atención al celular, y yo, bueno, fingía mirar la pantalla del televisor sin prestarle atención a la película, simplemente me encontraba bagando por mis pensamientos.

Estaba recostado en un sofá del cual me adueñe desde que entre a esta casa, Sam y Dani estaban sentados juntos en otro. Daniel no paraba de quejarse por que no le poníamos atención a la película la cual era su favorita

- no creo que en ese aparato - señalo él celular - haya algo mas importante que esto - ahora señalo la pantalla

- creeme que si lo hay - contesto Sam - además ya me se de memoria esa película, así que deja de molestar

- se supone que esto seria divertido - me miro haciendo un puchero, en lo que iba de la noche no había hablado mas de dos palabras, y Daniel se había cansado de intentar hacerme hablar

-me divierto mejor sólo - confeso Sam

-Aburrido -la paciencia de mi amigo por nuestro comportamiento parecía estar a punto de acabarse

-pues, jodete - lanzo Sam con una sonrisa burlona y mirándolo a la cara, y esa fue la gota que derramó el vaso de la paciencia, Daniel arrebató el celular de las manos de Sam lanzándolo hacia donde me encontraba. Por poco y me da en la cara, luego se lanzo sobre Sam para llevar a cabo su gran venganza, "una guerra de cosquillas", típico de estos dos

Sam odiaba que invadieran su espacio personal y Daniel era un experto en hacerlo, Daniel conocía la mayoría de las cosas que odiaba o le desagradaban a Sam y se aprovechaba de esto para molestarlo, una de las tantas cosas de odiaba eran las cosquillas y abrazos. Nunca terminaría de entender como era que este par eran amigos, si eran tan Diferentes.

-vamos, Samuel - pronuncio su nombre completo, solo por verle rodar los ojos al nombrado, que parecía no agradable ser llamado así - me lo debes

-no te debo nada - su voz estaba algo agitada por tratar de defenderse de los ataque de Daniel

-¡claro que sí! - afirmó - me tienes abandonado - se quejó - te la pasas con tu nuevo amigo y a mi me tienes olvidado, ¡eso no se hace! - recrimino

-¡y que quieres que haga!

-¡que dejes de ignorarme! - para él momento Daniel se había detenido de intentar hacerle cosquillas, mientras Sam intentaba sin éxito empujarlo para que se quitara

-¡no te ignoró!

-¡si lo haces!

-¡que no¡

-¡que si!

-¡quieren callarse! - exclamé llamando la atención de los dos

-el empezó - acuso Daniel señalando con un dedo a Sam, momento que aprovechó este para empujarlo logrando que cayera al suelo

DisfrazadosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora