Oscuridad Total (Shun y Tu)

Verdad

Narra shun

Keila se veía como si nada hubiera pasado y aunque me encontraba confundido no dude en abrazarla.

- ¿Como es que estas aquí? Si yo vi cuando te desvaneciste - puso su mano en mi cabeza y revolvió mi cabello

- así como ariadna tiene tus cadenas yo también tengo algo del fénix - su rostro al hablar de mi hermano no demostró más que decepción - ahora que sabes como se dio el lazo qué tienes con ariadna debes tomar una decisión

- no hay nada que pensar, debo ir por ella y regresarla al santuario - dije seguro

- yo iré con ustedes, desde que athena destruyó el lazo, el Olimpo se ha vuelto un caos - miramos a hades quien se había mantenido callado hasta ese momento

- ¿qué quieres decir? - Keila lo miro confundida

- me han informado qué sé esta haciendo un complot en contra de ariadna para darle muerte definitiva - camino hasta un espectro

- ¿quienes? Acaso nadie está haciendo nada - lo miro molesta, hades se volvió hacia nosotros

- algunos están tomando bandos, algunos apoyan a afrodita y ariadna a otros también están de acuerdo con eliminarla o simplemente no les importa - suspiro

- ¿acaso no se dan cuenta de que el equilibrio se romperá? - Keila se veía muy afectada y con muchas dudas decidí hablar

- ¿qué ganan al verla muerta? - di un paso al frente - ellos les otorgaron dones no tiene sentido querer matarla. - hades me miro pero fue Keila la qué hablo

- mi hermana es poderosa, sus dones y dotes como guerrera crecieron haciéndose poderosa, sin embargo su corazón también es puro y lleno de bondad, lo cual la pone en un gran peligro - agacho la mirada y hades continuo

- por medio de mi don y el de selene, ariadna se convirtio en el equilibrio del bien y el mal, todos estuvieron de acuerdo en dejar aquella balanza como guía de los corazones de todos, sin embargo la lucha entre el bien y el mal persiste y sin ella la maldad ganaría por completo provocando una guerra en el olimpo - cuando termino de hablar el espectro qué sé había retirado regreso con una caja de pandora - ahora que tu armadura te abandono y eres considerado traidor no tendrás como protegerte - hades tiro de la manija de la caja haciendo aparecer una sapuri de la constelación de andromeda - tomala

¿Realmente debía?

Narradora

En algún lugar cerca del cielo

Una hermosa mujer pelirroja caminaba por un largo pasillo hasta llegar a una habitación de madera adornada con oro y piedras preciosas, la cual fue empujada de manera estruendosa, sin embargo ese sonido fue el único que hizo eco en la habitación, cualquiera habría pensado que aquella recamara estaba vacía pero no

- ¿Como amaneciste hoy? - aquella pregunta lejos de ser cortes sonó venenosa

- no es algo que te importe, ni siquiera se que haces aquí - dijo dándole la espalda a aquella mujer, mirando desde la ventana a los pájaros ir y venir con aquella libertad qué ella no tendría

- me gusta verte triste, derrotada y sin esperanza, justo lo que te mereces - su sonrisa era grande

- aun buscas venganza, eres tan patética qué no sabes cuando ya perdiste - su voz sonaba vacía y eso irritaba a la pelirroja

- esto no es ni un poco de lo que tendrás, no siempre estarás protegida, o es que aun crees que vendrán a ayudarte, pobre ariadna no vez que ya se han olvidado de ti, athena prefirió a la tierra qué ti, te condenó a esto, rompió lo único que te protegía - ariadna sabia que aquello era verdad, suspiro pensando si su caballero también lo había sentido, si seria feliz, instantáneamente llevo su mano a su pecho

- no importa lo que hagas, ella nacerá y no podrás seguir interfiriendo persefone - ariadna la miro desafiante - no podrás tocarla, el no lo per... - no pudo terminar ya qué la mujer la tomo del cuello

- eso no pasará, morirás sin verme seguir siendo reina - la aventó hacia el  suelo - ahora date prisa qué tu esposo te espera

Ariadna se quedo tendida hasta escuchar la puerta cerrarse, escuchando una nueva voz

- señorita, el señor Dionisio la espera, debe cambiarse - aquella mujer era su dama de compañía y la trataba con mucho cariño, la ayudo a levantarse y a quitar las cadenas de oro qué retenían sus manos y cuello para poder cambiarse.

Al terminar se vio en el espejo, aquella cadena en su cuello significaba una vida de esclavitud, de infelicidad, de sacrificio, fue cuando no se pudo contener más, silenciosas lagrimas bajaron por sus mejillas, sin embargo no salía ningún solloso, sus ojos seguían inespresivos, solo deseando el bienestar de todos, pero muy en el fondo queriendo ser rescatada de aquel infierno.

************************************
Hola hace mucho no escribía, lo siento, espero les haya gustado, si es así no olviden votar y comentar que eso anima mucho a todos los que empezamos a escribir, sobre todo a los que empezamos con cosas pequeñas, además qué cada voto y comentario es un beso de shun para ustedes 😄

Hasta luego 😊