® Nothing To Lose

Latido 29

Estaba recostado en las piernas de Vic y él acariciaba mi pelo dulcemente, era una escena bastante dulce o algo, pero me sentía bien, él estaba logrando calmarme.

"Mike no dirá nada, pero debo hacerlo yo o tú." No sabía que decir al respecto, no tenía ganas de revólverme los sesos pensando en que hacer luego con Chris. Si bien Mike prometió guardar silencio, era bajo una condición y yo realmente no quería decirlo, eso mataría todo lo mío con Chris.

¿Qué podría hacer? Odio mentir. Y yo mismo fui quién se metió en esto, creo que sí debía hacerlo, de otro modo él lo sabría igual.

"Yo hablaré con él." Miré hacia arriba juntándome con su mirada fría. No creo que Vic cambie mucho su forma de ser, él siempre ha sido ese tipo de persona antisocial aunque conmigo ha sido diferente no me quita esa impresión por nada. "¿Por qué has faltado a clases?"

"Tú no has ido." Respondió simplemente. Yo sonreí involuntariamente, eso me gustaba oír, me gustaba saber que a alguien parecía importarle aunque no sea así, a mi me gustaba llenarme de esta dulce y amarga ilusión de importarle a alguien, quizá por eso estoy con Chris, porque a él pareciera importarle las cosas de mí.

Esta vez no nos tiramos al mar y no nos mojamos, a pesar del calor que había preferimos ir a unos árboles y quedarnos abajo en la sombra. Vic estaba recostado cerca de mí mirando las hojas mecerse.

"Gracias por venir." Agradecí. Borrando el silencio. Volteó a verme y asintió un par de veces.

"No pasa nada." Respondió sonriendo, supongo que mis ojeras son un chiste. Me acomode en el lugar y cerré los ojos.

"Creo que dormiré un poco." Dije suspirando, finalmente sentía el cuerpo cansado.

"Ok." Él se me acercó y se recostó más a mí lado, no hice nada, no creo que este algo mal o por el cual preocuparse. "Quiero conocer dónde vives. Nunca me llevaste." No pensé que era necesario llevarlo, ni siquiera he llevado a Chris, no creo que eso sea correcto o algo así.

"Esta bien. Pero no es un lugar bonito." Concluí, él no respondió nada, o eso creo, yo me quede dormido así pronto, me relajaba tanto este lugar.

Aunque, al despertar me sentí algo mareado, tal vez por haber cambiado el sueño y dormir fuera de cama. Estaba por levantarme, el problema iba en que tenía a Vic casi sobre todo mi cuerpo, yo creo que él sintió algo de frío ya que yo igual tenía un poco de ello.

"Vic, despierta." Lo removí, a pesar de que me costo logré que despertara, una vez despiertos caminamos hambrientos a la estación de buses.

"¿Qué cocinaras?" Pensé un momento en eso. Veamos, no soy bueno en la cocina como mamá, así que lo más probable es que improvisaría algo, mamá siempre hace eso y siempre sale con platos exquisitos, yo no pedía un plato de dioses, pero que fuera comestible me basta.

"Hay vemos." Tomamos el primer pasaje y subimos a penas estuvo estacionado el transporte. Fui a lado ventana, me gusta siempre ventana, a parte de que nadie te pasa a llevar, puedes distraerte y estas a un lado del cual es más fresco. Vic no protesto, supongo que le da lo mismo.

En todo el camino fui pensando en qué cocinar y otra parte me fui dormido, a pesar de que solo tenia en mente arroz o fideos, quería hacer algo mejor.

Tomamos el siguiente transporte a la parada cerca de casa.

"Realmente no sé qué preparar." Dije a una cuadra de casa.

"¿Compramos comida china?" Preguntó, revise mis bolsillos y mi mochila para buscar dinero asintiendo a su propuesta. No encontré mucho, pero si juntábamos podríamos almorzar algo.

"¿Cuánto tienes tu?" Tomé lo que tenía y le enseñe apenas mil quinientos en monedas (hablo de peso chileno, no sé cuánto este en otros lados o a dolar)

"Alcanza, yo tengo el resto." Él saco su billetera y me la enseñó. Caminamos dos cuadras a bajo dónde estaba la comida rápida, el local se llamaba 'Fu Pao' y sí, atendían chinos, lo digo porque me toco una vez ir a un local de comida china y atendían peruanos, eso fue lo más raro que me ha pasado en estos locales. Lo bonito acá era que atenderían los dueños y eran familia, la madre y el padre pasa al todo el día ahí junto a su hijo menor de unos cuatro o cinco año, mientras el mayor creo que debe ser adolescente o algo así, hacia los pedidos a domicilio. "¿Qué pido?"

"Carne mongoliana de cerdo con papas fritas y wantan."

"Salsa de soya." Añadió.

"Si quieres, a mi no me gusta." Aún no encontraba el gusto a la salsa de soya, honestamente no me gustaba para nada.

Vic entró a pedir la comida dejándome afuera esperándolo.  

Cuándo llegamos a casa y comimos todo, mamá no estaba, supongo que fue al trabajo ya, sé que tenía que ir a casa al otro lado de la ciudad, así que se demoraría mucho, eso y contra do haber que no tenga otras casa que ver. Salí fuera a regar sus flores que siempre me encargaba, les tiré agua a cada una de ellas y al pasto de fuera. Vic se había quedado dentro viendo la televisión.

Yo siempre había pensado que Chris seria el primero en venir a casa y no exactamente porque lo invitaría, sino porque tal vez él me insistiría.

Pensé mucho en las cosas que me estaban pasando con mi novio, él parecía algo molesto cuándo le reclame sobre su partida, pero también supe que el ignoraba mi intento de huir del problema, él no me preguntó ada de eso, tal vez la madre no se lo dijo o algo. No es que yo se lo diría, realmente quería que él se enterarse por medio de alguien y me prometiera nunca dejarme, como suele hacerlo la gente que te ama enserio. Pero no fue así, yo y mi realidad nos llevábamos muy mal, ella me odiaba realmente y eso me molestaba enserio, porque nada me resultaba como quería que fuera para mí las cosas.  Es frustrante el hecho de sentirte tan nesecitado de aprecio, tal vez es eso mismo que me llevo a meterme con Vic, porque a él parecía importarle algo mi patética existencia.