4. Moirai.

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"Allí es donde la Moira admira con sigilo y un poco de angustia al espartano que osaba ofenderla con su presencia mortal, mientras saborea en su mente el sabor de la sangre humana. Porque aquel que enfrenta a la Moira está sellando su destino con sangre, sudor y lágrimas"

─ ¿Cuál es su nombre señorita?

Habló rápidamente sin quitar la vista de pantalla, no quería descuidarse y ser asesinado por la Gorgona Euryale, por lo que debía ser precavido con sus movimientos. 

¡Demonios!

Comentó enfadado a la nada, pues aquella bestia con cabellos de serpiente había matado a su personaje y además también le enfadaba que la joven a sus espaldas no le respondiera; por lo que ligeramente cabreado puso pausa al juego y dirigió su vista a la chica con cabellos de océano.

─ Juvia, soy Juvia

Dijo bajito emulando a una pequeña que siente temor por el rostro severo de su padre ─ Y de verdad, Juvia lamenta fastidiarle su juego  empezó a jugar con algunos mechones de cabello con nerviosismo ─ Juvia promete que hará lo que tenga que hacer en completo silencio  y se acomodó despacito en la silla del comedor observando como su anfitrión continuaba con su labor.

─ Juvia es usted una mujer muy extraña

Dijo fijando su vista en la fémina, quien era bastante atractiva a su parecer ─ Habla en tercera persona lo cual es muy particular─  observó como volvía a jugar con su cabello con cierto nerviosismo ─ Aún así, no deja de ser adorable  comentó regresando su vista al juego, a sus espaldas el rostro de la chica enrojeció violentamente.

─ Gra... Gracias  Fue lo que salió apresuradamente de sus labios, se sentía tan abochornada ─ Pero, etto... ¿Juvia podría saber su nombre?  comentó con cautela, ya que aun sentía cierto temor del joven que no quitaba su vista de la pantalla ─ Así Juvia podría agradecerle de forma adecuada  comentó mientras regresaba a sentarse con delicadeza en la silla, como si temiera romperla.

─ Soy Gray─  sonrió satisfecho, ya que al fin era dueño de la cabeza de aquella Gorgona obesa, y eso le alegraba de cierta forma, todo su esfuerzo había valido la pena. 

─ Muchas gracias Gray-sama  Fue en ese instante en el que alejó su vista de la televisión un tanto consternado ¿Por qué la chica mostraba respeto a su persona?

─ No hay nada que deba agradecer  Su cuerpo se tenso un poco al oír aquello, pues ahora sus ojos no podía evitar dar una ojeada a ese torso definido que se acercaba mas y mas ─ Mejor dejémonos de formalidades ¿tienes donde quedarte Juvia?  Ella por su parte negó con la cabeza; no tenía ningún sitio a donde ir.

─ Entonces puedes quedarte aquí en lo que encuentras un sitio  Comentó asombrado de lo que pronunciaban sus labios, la joven por su parte le dedicó una sonrisa de agradecimiento; mientras su cabeza no dejaba de imaginar el problema en que se estaba metiendo, se sentía como Kratos desafiando a las Moiras, vendiendo su destino a un espíritu invisible. Acababa de sellar su destino con una Moira de ojos color cielo y cabellos de océano, que al parecer no dejaba de sonreír a su persona. ¡Que Kami-sama se apiadase de su alma!

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⏰ Última actualización: Apr 23, 2020 ⏰

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