MIRANDO POR LA VENTANA...

LA MUERTE CAPITULO II

Dejemos el cerebro aparte un rato, me apetece halar de un tema controversial, y que me atemoriza, y me atormentaba las noche. La muerte, es un tema muy general, depende del punto de vista de la persona, si es religiosa, da igual en que dios crea, pero tiene esa tranquilidad de que hay otra vida, otra oportunidad, una vida sin complicaciones, una vida eterna llena de placeres. ¿Pero los ateos? En que desahogan ellos el miedo a la muerte, yo por ejemplo intento no darle importancia, pienso que es una cosa natural, y que en consecuencia no debo pensar en eso, por que es perder el tiempo. ¿Si tengo que morir igual, para que preocuparse? Ya llegara no tengo que esperarla, qué venga si quiere, no le tengo miedo, no temo a la muerte.

Pero se que incluso la gente creyente tiene miedo a la muerte, no a la muerte en sí, pero tienen miedo a que dios no los acoja en su jardín, y se pasan toda la vida con restricciones que se ponen ellos mismos, no son libres, su propio cerebro, su propio miedo a la muerte, a dejar de existir no les deja ser libres. Y creo que en parte son conscientes de lo que hacen, de que de alguna manera están perdiendo el tiempo, no están viviendo las mismas experiencias que un ateo. Pero no por eso, ser religioso es malo, alomejor yo me engaño, y por ser un infiel me paso toda mi siguiente vida en el infierno, en un castigo eterno.

Por eso, cada persona tiene su manera particular de vivir la vida, cada uno es diferente, su manera de pensar, sus gustos, su valentía, su simpatía, sus emociones en general sin distintas en cada persona.

Yo por ejemplo siento que he nacido demasiado pronto, pienso que mi sitio es el futuro. Creo que estoy adelantado a esta época. Para mi la sociedad ideal, sería una donde los humanos sean exploradores a tiempo completo. Debemos de tomar ejemplo del pasado, los vikingos y los europeos, cuando pensaron que había detrás de ese mar infinito, América. Esa sed de curiosidad, esas ganas de explorar lo desconocido. Otro ejemplo más cercano a nuestros tiempos, la luna, Neil Armstrong, el primer humano en pisar otra roca que no fuera la tierra, aunque fuera el objeto celeste mas cercano a la tierra, fue un gran mérito, adentrándose a lo desconocido.

La sensación que debió sentir en ese momento debió de ser genial, debió de sentir como una unificación de el con toda la humanidad.

Y llegara el momento en el cual lo sabremos todo, la cima del conocimiento humano, el fin de todo, ahí será el momento donde habrá dos opciones, la primera seria un cambio total en la forma de pensar de toda la sociedad, ahora solo serviríamos para disfrutar, por que ya lo sabremos todo, todos tendríamos a una flota de robots que sostendrían nuestra economía, pero nada más, y nosotros seriamos servidos por ellos hasta el fin de los tiempos. O otra opción, un suicidio masivo, la vida ya solo serviría para disfrutar, para nada más, no sentiríamos ese agobio, esa presión constante que nos dice que podemos morir, el miedo desaparecería, habría una cura para todas las enfermedades. Sería una vida infinita, las religiones caerían, seriamos inmortales, y la gente al no saber que hacer, se quitaría la vida, no estamos preparados para vivir eternamente, y menos vivir sin ningún problema. Aquí empezaría la decadencia humana, si es que no empezó antes, las tasas de suicidio serian altísimas, y la gente estaría desequilibrada mentalmente hablando.

Y la poca gente que quedaría, todos serian filósofos intentando hallar una solución a una de las preguntas mas importantes de todos los tiempos, qué sentido tiene vivir. También podría haber artistas conceptuales, que dirigirían toda su ansiedad provocada por la vida eterna a sus cuadros o libros, o cualquier otra forma de arte que se invente de aquí a miles de años.

Y de aquí salen otras dos opciones, una es la misma que antes, al final toda la gente acabaría suicidándose por la presión, o llegaría el momento en el que, si duramos muchos millones de años, dejaríamos de ser humanos, seriamos otra especie mucho más evolucionada que nosotros hasta el punto en el que el universo se empezaría a desmoronar, el fin del universo, del cuan seria muy complicado escapar, si eso es posible.

Por qué debería de haber otros universos y también una manera segura de pasar a otros universos. Por eso creo que cualquier civilización que llega aquí debería de ser una civilización donde los individuos. pertenecientes, deberían de ser seres sin cuerpo, solo mente, seres infinitamente complejos que solo serían flujos constantes de conciencia capaces de traspasar dimensiones i universos. En este momento esa especie, que ya no seria ni de lejos humanos, se convertiría en una civilización Interuniversal.

Pero ahora somos una civilización mala, hay guerras, hambre, demasiada desigualdad económica i social, con demasiados tabús que deben superarse. Desde mi punto de vista, vivimos en la mejor época de la historia, pero igualmente falta demasiado trabajo por hacer, para poder avanzar debemos pasar por alto nuestras diferencias con los demás.

Las diferencias sociales deben apartarse y eliminarse para poder unificarnos todos, así nos ahorraríamos muchísimos problemas: guerras emigraciones forzosas, desigualdades sociales y económicas. Esto es injusto i por culpa de esto no somos lo libres que podríamos llegar a ser.

La libertad es un derecho que no se cumple, es una cosa, un estado indispensable para la vida.