Me levanto de la cama, a duras penas miro el reloj y me doy cuenta que faltan tan sólo quince minutos para llegar puntual a la estación del autobús, rápido me visto y hago todo lo que tengo que hacer antes de salir de casa y dirigirme a la estación.
Observó bien a la gente que está formada en la fila del autobús y reconozco aquella cabellera negra acompañada de un chico robusto, supongo que es su novio ya que están hablando alegremente...