Un Día Normal En El Cielo.

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-le agradezco mucho por todos los cuidados que me dio, muchas gracias-

-no se preocupe señorita,todos aquí estamos muy agradecidos con ustedes, los guerreros que defienden a nuestro clan de los temibles demonios -.

-ya veo-responde alagada nerobasta.

-suerte, que la fuerza de nuestro pueblo vaya  con usted-

-igualmente-

Nerobasta esta totalmente recuperadada y lista para volver al frente de combate, pero aún no a recibido órdenes por parte de su superior, ludociel.

De hecho, ella no lo ha volvido a ver desde hace 2 días.

-me preguntó qué plan tendrá ahora en mente, bueno, conociéndolo debe estar concentrado en ello.... tanto así que no tuvo tiempo de visitarme...-. piensa mientras un poco de tristeza se dejaba ver en los ojos de ella.

-bueno, debería disfrutar un poco mi día libre- sonríe, tratando de olvidar lo sucedido.

Nerobasta caminando se adentra poco a poco en la ciudad, tiempo a pasado desde que estuvo en ella.

Observa curiosa a todos los habitantes y nuevas estructuras del lugar.

-a cambiado mucho en poco tiempo-piensa.

Pronto un sonido interrumperia su reflexión. Su estómago a gritos, ruega por un poco de comida.

-creo que deberia comer algo- dice riéndose.

A lo lejos logra ver una taberna, posiblemente inaugurada recientemente.

-creo que algo rápido será suficiente-

Al entrar, sonidos de risas, llanto entre otras cosas, se hacen presente ante ella.

Aún aquí, en el cielo, los soldados tambien pasan su tiempo en tabernas para beber entre camaradas.

Ella toma asiento en una mesa, pronto un trabajador del lugar va a recibirla.

-bienvenida a nuestra taberna, ¿que le puedo servir?- pregunta un chico, de unos 19 años.

-Una jarra de cerveza y algo de comida-

-claro, que tipo de comida quiere que le preparemos-.

-quiero lo más comestible que se pueda conseguir en un lugar como este- responde nerobasta con su típica mirada despectiva.

-comprendo, enseguida-. responde el chico un poco confundido por aquel comentario.

Al pasar unos minutos, el chico vuelve con una jarra de cerveza.

-gracias-

Nerobasta comienza a beber un poco de aquel amargo líquido.

Ella nunca a bebido por gusto, pero hoy será una excepción.

Mientras bebía, los ojos de ella logran ver a una figura familiar.

A unos metros de donde se encontraba, esta ludociel, bebiendo algo de licor.

-¿que hace el aqui?-. piensa sorprendida.

Ella sabe que el usualmente  no frecuenta lugares como este.

-pobre, siempre está solo cuando no está junto a su hermano-.

-¿debería ir a hacerle compañía no?-piensa nerobasta, dejando en evidencia que busca una excusa para acercarse a él.

Decidida se pone de pie, camina despacio pero segura, cada vez más cerca de la mesa de ludociel,pero de pronto se detiene, sus músculos dejan de funcionar y  su ojos se mantienen observando sin pestañear aquella escena.

Una mujer acaba de sentarse junto a ludociel, el la recibe felizmente y juntos se sientan para beber y comer.

aquella mujer no es una desconocida para nerobasta quien sorprendida sólo logra pronunciar.

-s...¿Stela?..-.

Fin del capítulo.
Gracias por leer.
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     UN DÍA NORMAL EN EL CIELO 2


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