Consecuencias [✔]

CAPÍTULO TRES: ATACAR Y SEGUIR ATACANDO

Había pasado una semana desde que Menma se había ido y la actitud de Hinata con Sasuke había cambiado drásticamente, haciendo que él se preguntara que le había dicho el rubio para volver a confundir tanto a la chica.

Notaba que si él no se apresuraba en hacer algo iba a perder a su princesa. Ya era suficiente de ir despacio, si tenía que ser agresivo lo haría, claro que lo haría. Conseguiría que la Hyuga solo pensara en él o moriría en el intento, ya que la ojiperla era de armas tomar.

Se dirigió a la residencia Hyuga como lo iba haciendo toda la semana, pero al contrario que las otras veces no se conformaría con la respuesta de uno de los sirvientes de la chica, indicándole que estaba ocupada. Pasaría a verla, y si se tenía que escabullir para hacerlo lo haría. Tal vez casi nunca se tomaba las cosas en serio, pero cuando las hacía conseguía cualquier cosa que se propusiera, era un Uchiha después de todo.

—Hinata, tenemos que hablar—dijo Sasuke abriendo la ventana de la peliazul después de escabullirse en la mansión de la chica.

Pero para su sorpresa, frente a él estaba ella cubierta por una diminuta toalla que a penas tapaba sus voluptuosos pechos y mostraba sus cremosas piernas.

—¡Uchiha! —gritó cabreada a punto de ir a golpearlo, pero antes de que lo pudiera hacer el chico cayó desplomado mientras de su nariz salía un chorro de sangre, haciendo un fuerte ruido cuando cayó al piso.

Rápidamente su primo y padre fueron a la habitación de la chica, pero ella más rápida había ocultado al morocho en su armario, que aún seguía inconsciente. Por lo que alegando que no estaba vestida los sacó rápidamente.

Sasuke sintió pequeños golpes en sus mejillas que cada vez se hacían más dolorosos, por fin consiguiendo que se despertara.

—Hime—susurró a una Hinata ya vestida.

—Idiota—lo llamó ella molesta. —¿Se pude saber cómo se te ocurre colarte en mi cuarto? —preguntó cabreada.

Él la miró con algo de resentimiento haciendo que ella se pusiera más seria, él era quien había invadido su intimidad. Si había alguien que se debía enfadar era ella, no entendía porque la estaba mirando así.

—¿Por qué me has estado evitando? —preguntó directo y acercándose a ella, dejándola sorprendida.

—N-no te evitaba—titubeó, pero notaba como él la taladraba con sus orbes negras. —¡Deja de mirarme así! —le gritó molesta.

—¿Es por Menma? —le dijo, dejándola aturdida. —Me gustas—le declaró de nuevo consiguiendo sonrojarla. —¡Me gustas Hinata Hyuga! Siempre lo has hecho. Eres la única para mí, no se hace cuanto tiempo mi corazón solo late por ti—dijo atrayendo su mano al pecho de él, pero que ella se apartara rápidamente, era como si el contacto con él la quemaba.

Era cierto que la declaración que le había hecho Menma a la hora de irse le había hecho dudar, además de aquel beso de despidida que el rubio le había dado. Y aunque había sido feliz sentía que de alguna manera había traicionado al morocho y no podía mirarlo a la cara. Se encontraba totalmente confundida, sus sentimientos estaban hecho un verdadero cacao, no sabía a quien quería.

—Escógeme—le susurró en su oído haciendo que sus nervios aumentasen y lo empujase.

—¡No hagas eso! —le recriminó, pero él solo sonrió, se había dado cuenta que su cercanía la afectaba.

—Solo soy sincero con mis sentimientos, tú lo sabes, mi amor solo es tuyo—le decía haciendo que sus nervios aumentaran al notar su cercanía, sobretodo sus labios, logrando que su respiración se agitara, casi estaban por volver a besarse cuando Neji abrió la puerta.

Y Hinata sin saber que más hacer, y por la horrible vergüenza de ser pillada por su pervertido primo atacó a Sasuke con un puño suave que él no se esperó, dejándolo totalmente inconsciente.

Cuando Sasuke abrió los ojos Hinata estaba acostada en una esquina de la cama donde él se encontraba. Estaba dormida, y parecía un hermoso ángel.

—Se quedó todo el tiempo contigo—dijo Sakura entrando. —La pobre estaba muy asustada—dijo burlona.

—Muy graciosa frentona—respondió la ojiperla despertando.

Cuando los ojos blancos se toparon con los negros ella abrazó al Uchiha, realmente había estado muy preocupada de que lo hubiese herido. Su puño suave había evolucionado mucho, incluso mejor que el de su padre o el de cualquier miembro de su clan, por lo que era peligroso.

—Lo siento mucho—se escusó. —Me alegro tanto que estés bien—decía feliz.

—Me gustas Hime—le volvió a decir acariciando su mejilla y que nuevamente ella se sonrojara.

Sakura al ver que sobraba salió de la habitación, estaba muy sorprendida por el actuar de su compañero. Ella ya había escuchado otras veces la confesión de amor del chico hacia otras chicas, pero era la primera vez que realmente le trasmitía algo, parecía que iba en serio con la peliazul.

—¡Solo dame tiempo, necesito aclararme! —le dijo y él solo sonrió.

—Solo no me evites princesita—dijo burlón haciendo que ella le diera un pequeño golpe en el hombro.

—Idiota—susurró.

Notas de la autora: Bien, aquí está el siguiente cap, espero que les guste mucho y quiero saber sus opiniones. De verdad que les agradezco a todos los que me dejan un comentario me hacen realmente feliz y me da ganas de escribir más.