Te quiero, Idiota [EDITANDO]

15.- Corporate PAN

POV Alice:

Solté un gemido, el sonido del choque que hacían nuestros cuerpos, se movía brutal. Gruñe en mi oído, siento el orgasmo cerca, sus embestidas cada vez era más fuertes y profundas.

-¡Ah, Si!

-Eres mía.

Dios, voy a...

Exploto.

Ola tras ola de placer me inundaba, gritó, arqueo mi espalda, gime en mi oído. Mi respiraciones es agitada, la música suena en las paredes, caigo en cuenta.

Mierda.

Se levanta, se saca el condón, lo bota y se comienza a vestir. Me tapo con las sábanas y lo miro, el no a mí.

-Sean... - lo llamo, confundida, se va, así nada más.

-Eso estuvo bien ¿Repetimos? - No me mira, siento una punzada en mi corazón. Sale de la habitación, me quedó ahí, mirando a la nada. Mis lágrimas resbalan por mis mejillas, bajo la mirada, y veo, con la luz de la luna, una pequeña mancha de sangre.

Acabo de perder mi virginidad.

Salgo de las sábanas, me duelen las piernas, no puedo pararme bien. Lo Odio. Me comienzo a vestir, lágrimas ruedan por mis mejillas, mi llanto es silencioso pero doloroso. Confíe, y salí herida, así deben sentirse esas pgersonas cuando saben nuestro secreto.

Cojo mi bolso, me miró al espejo de cuerpo completo. Mi cabello está desordenado, mis mejillas manchadas del rímel porque lloré, mi vestido arrugado. Veo como una lágrima va rodando por mi mejilla y recuerdo.

*Flashback*

-No llores, no hay tiempo para llorar - oigo como el entrenador me grita, me muerdo el labio. Duele. Tengo mi brazo detrás de mí espalda, doblado, de una forma que no es sana.

-¡Ya no puedo más! - Le gritó, lágrimas siguen brotando de mis ojos. Michael, dobla un poco más mi brazo, gritó de dolor, mis ojos borrosos logran divisar a mis amigos y mi hermano. Están sentados en una banca, unos que otros me miran pero cuando los miro apartan la mirada, otros están con la cabeza agachada y otros se quedan quietos viéndome, sin inmutarse, algunos con lástima pero saben que no pueden hacer nada.

Porque el que desafía a un superior de aquí, no aparecen el día siguiente.

Mi hermano me mira con preocupación, veo sus ojos que tiene ganas de llorar pero no lo hace, se muestra fuerte. Me lo quedo mirando, me dobla el brazo más y siento mis huesos crujir, romperse, gritó con desesperación, más lágrimas brotan. Vuelvo a mirar a mi hermano, este ya no me mira, esconde su rostro en sus manos, mientras mueve la cabeza de un lado a otro. Esta llorando.

-Los valientes no lloran, ¿Te haces llamar valiente? - Michael me grita, me muerdo el labio inferior. -Por eso tus padres se mataron, no quisieron verlos, no quisieron vivir a lado de ustedes, porque son unos monstruos.

No.

No.

No.

-No... Eso es mentira. - mi voz sale débil.

-Ellos mismos me lo contaron, antes de suicidarse, no los querían, ellos los odiaba a los tres. - Vuelvo a mirar a Alex, sigue en la misma posición. Dirijo mi mirada a mí otro hermano.

Eso es mentira.

Toda la rabia crece en mí, la furia corriendo por mis venas, no puedo creer lo que estoy escuchando. Le doy una patada a Michael en su costillas, haciendo que su agarre en mis brazos se debilite, y logrando que me pueda soltar. Estiró mi brazo, mis huesos vuelven a crujir pero ya no siento dolor. Cierro mi mano derecha en un puño, de repente siento por el rabillo del ojo una luz, pero no le tomo importancia. Con todo la fuerza que me queda, dirijo mi puño a su pómulo, de repente veo como Michael sale volando y se estrella en la pared, haciendo que está quedé en escombros.