Tal vez me gustas. [RenMin]

[8]

Día Viernes, lo que significaba "Fiesta". Todo estaba listo en casa de ChenLe, al ser quien tenía más espacio en su casa, constantemente resultaba ganador para ser el anfitrión de las fiestas. El día anterior habían estado con JeNo durante el día, algunos dándole un presente o simplemente dándole las felicitaciones por su cumpleaños.

Hoy sería la celebración en grande, JeNo había invitado a chicos de su clase, y esos chicos a más chicos, iba a ser realmente increíble. Siendo casi las nueve de la noche, la gente empezaba a llegar, el volumen de la música iba subiendo, y los tragos en la nevera necesitaban ser repuestos.

RenJun buscaba una cabellera pelirrosa entre la multitud de vez en cuando, en su mano había había un vaso con algún líquido desconocido en su interior, pero él ya se sentía algo extraño dado que era por lo menos el cuarto que bebía. Hizo un puchero al no encontrar al chico de mirada felina en ningún lugar, pronto servirían el pastel para dar inicio a la real fiesta, y quería que JaeMin estuviera cuando pasara. Rendido una vez más de no encontrarlo, se dispuso a su siguiente búsqueda, quería algo diferente aquella noche, y sabía con quién podría conseguirlo.

— ¿Ha visto a KunHang? — Le preguntó a Ten, quien se encontraba sirviendo un par de tragos en la cocina.

— Lo vi en la piscina hace un rato, tal vez aún esté ahí — Sugirió sin levantar la vista. El castaño cambió de dirección hasta allá, encontrando a su amigo en el borde de la piscina del gran patio junto con otros chicos que él no conocía.

— Hendery~ — su voz sonó melosa desde un inicio, por lo que el mayor comprendió que estaba en busca de algo — ¿Tienes algo que puedas darme? — hizo una señal con dos de sus dedos sobre sus labios de manera sutil. El contrario lo miró dudoso, ciertamente no era la primera vez que su amigo le pedía uno de sus cigarrillos "especiales". — Puedo pagarlo, si eso quieres.

— No, no es eso... Te lo daré, pero hazlo conmigo, ¿si?, va siendo tiempo de la última vez que lo hiciste. — El menor sonrió en respuesta, esperando que  KunHang le proporcionara lo que quería. El pelinegro buscó en sus bolsillos su cartera de cigarrillos, sacó uno para luego proceder a encenderlo y dar la primera calada, se lo cedió al más bajo luego, quien no tardó en llevar aquel objeto sobre sus labios para copiar las acciones del mayor. — Sé que no es que tengas que pedir permiso, o algo así, pero, ¿Qué opina ChenLe de que fumes marihuana? — Aceptó el cigarro nuevamente, esperando un momento antes de volver a dar una calada.

— No le gusta, obviamente, como a ninguno de los hyung, ¿recuerdas la primera vez que nos vieron hacerlo? se enojaron mucho en ese entonces — Rió ante el recuerdo, aunque cuándo había sucedido, no le había causado gracia para nada

— Se enojaron más conmigo por dejarte hacerlo. — Hendery también rió, marcaron un ritmo entre calada y calada para seguir conversando sobre cómo todos sus amigos les habían regañado por hacer tales cosas, aunque con el tiempo entendieron que ellos lo harían aunque les molestara, por lo que todos estuvieron de acuerdo en no decir nada mientras ambos lo hicieran lejos de ellos.

— ¡RenJun! — El menor soltó una maldición al escuchar la voz de su mejor amigo detrás de él, rápidamente devolvió el cigarro a su dueño, y se giró a ver al dueño de casa. — ¿Qué estás haciendo? —Le miró con sus ojos entre cerrados, el castaño negó con la cabeza mostrando una pequeña sonrisa. — Lo que sea, JaeMin hyung llegó ya, le dije que estabas esperándolo desde hace un rato.

RenJun se mostró emocionado, más de lo que ChenLe hubiera esperado, por lo que antes de que se diera cuenta, estaba siendo arrastrado por el mayor dentro de la casa mientras preguntaba dónde estaba el coreano. Cuando el más bajo encontró por fin a quien buscaba, se dirigió hasta él mirando con una sonrisa a todos los chicos que se encontraban a su lado.