Como Odio A Mis Padres

Capítulo VIII

Por fin ya era el día más esperado de Lupe por que ya había pasado una semana y su hija iba a nacer, eran como las 12 del medio día cuando sintió de que Mía ya iba a nacer; entonces llamó a Matías para decirle de ya estaba por dar a luz. Cuando Mati llegó se fueron al hospital lo más rápido que pudieron.

Cuando llegaron Lupe fue trasladada a la habitación de parto que ya estaba todo listo para que ella diera a luz y como a las 4 de la tarde nació Mía, Matías y Lupe estaban recontentos de que su hija ya había nacido.

Cuando llegaron a casa de Lupe Matías le dijo que tenía dos sorpresas una era que había terminado con algunos detalles que le faltaban a la habitación de Mía y otra que el se iba a vivir con ella y su hija. Lupe se quedó tan sorprendida que no sabía que decir pero Mati si sabía que hacer y le dio un beso apasionado y tierno.

Esa noche sin que ellos se lo esperarán todos sus amigo y familia llegaron a su casa para celebrar la llegada de Mía a su casa, eso si Lupe estaba intranquila por si llegaban a caer sus viejos y su hermana ya que no se llevaban bien y no se hablaban hace 9 meses como Mati se dio cuenta de que ella estaba intranquila le pregunto:

-Que pasa Lupe?- pregunto Matías preocupado

-Es que estoy con la tema que mis viejos y mi hermana vengan a ver a nuestra hija ya que hace que 9 meses no nos hablamos- dijo Lupe

-No te preocupes mi vida no van a venir, ahora relájate y disfruta de la cena- dijo Mati y la besó

-Tenes razón mi corazón- murmuró Lupe y se besaron de vuelta.