No puedo creer que ya allá pasado tanto tiempo desde que tengo que sufrir esta condena, que ya este a tan poco tiempo de terminar con este castigo y tomar el poder en el infierno.
Todavía recuerdo el momento en el que me mandaron a vivir en este lugar.
~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~-No, no es justo que me manden ahí- Me queje, no podían mandarme a aquel asqueroso lugar que era peor que cualquier infierno. Se supone que él es el señor misericordioso. ¡NO PUEDE HACERME ESTO A MI, NO PUEDE!
-Kathe yo no deseo hacer esto, pero tu sabias que no podías relacionarte con ningún ángel o demonio. Y mucho menos relacionarse con uno de cada bando.Bueno, que les puedo decir, Agustín y Austin fueron mi debilidad, y también la razón de mi condena. Debido a que al cumplir mis 18 años tengo que elegir un bando permanentemente mis padres pensaron que si yo tenía algún vínculo amoroso con nadie que perteneciera a ninguno de los bandos, los cuales podían ser ángeles y servir a Dios o todo lo contrario como los demonio que servían a Lucifer, ya que podía afectar en mi decisión final, por lo cual se me fue prohibido relacionarme con ninguno. Pero había un ángel y un demonio a los cuales se me fue imposible resistirme.
Agustín era un arcángel de cabello rubio y ojos azules como un zafiro, sus alas de un color plateado eran de las más hermosas de todo el cielo, y a mí me tenían cautiva. Por otro lado Austin era un demonio morocho de ojos verdes como una esmeralda, y sus alas tan diferentes a las de Agustín de un color negro intenso debido a que era uno de los demonios más cercanos a Lucifer. Está de más decir que ambos eran tremendamente guapos y tenían el físico de alguien que llevaba toda su vida dentro de un gimnasio.-Te ruego que no me mandes a la Tierra ese lugar de…
No logre terminar de decir la oración cuando la voz que menos quería escuchar en estos momentos me interrumpió.
-La pequeña Katherine rogando por no recibir un castigo el cual merece.-No por favor no, él no. Tenía que llegar en este momento. Maldito Lucifer.- Si no fuera por el hecho de que fui yo quien ayudo en tu creación, dudaría que tiene parte demonio. ¿Qué es eso de andar rogando? Eso no es digno de ningún ser creado por mí. Serás enviada a la Tierra y sin discusiones.Los odiaba, esto no era posible, ¿un ser como yo, superior que el mismo Dios y Lucifer juntos, mezclado junto a esa raza de inservibles que habían fallado hasta en su único propósito que era adorar al señor de todos los cielo? No esto no se quedaría así, pero ahora lo único que podía hacer era aceptar su maldito castigo e ir a la Tierra donde tendría que vivir con la familia Luchira, ¡LA PEOR FAMILIA DEL MUNDO! La familia de Heidi son los más religiosos, creyentes de mi padre y para ellos señor. Y la familia de Afton todos creen que mi otro padre, el señor de los infiernos, se levantara y tomara el mundo, obviamente con ayuda de ellos. Sin contar a su fastidiosa hija de 15 años Marcie, a ella lo único que le importa son las fistas y revolcarse con la mayor cantidad de chicos que pueda antes de tener 18. De toda la familia, ella es la que me da más asco a la que menos tolero.
~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~El ruido de mi despertador me saco de mis pensamientos. Era hora de ir a mi primera clase en el nuevo Instituto, lo que eso significaba que sería el centro de atención de todo el mundo. Genial. Esta era la segunda vez que me cambiaban de Instituto en el año por el hecho de que comienzo a levantar sospechas sobre mi verdadera naturaleza, lo cual está estrictamente prohibido. Pero no puedo evitarlo, no puedo evitar usar mis poderes contra ellos. Está bien soy mitad ángel, pero también soy parte demonio, y los poderes que vienen incluidos en estas dos caras de mí son muy difíciles de contener cuando me enfado demasiado.
Comencé a cambiarme, me puse una musculosa blanca acompañada de una campera de cuero negra, con unos jeans verde agua y unos zapatos de taco aguja negros. El pelo me lo deje suelto, dejando ver mis muy marcados bucles castaños. Me mire en el espejo y comprobé lo que ya sabía, no habría forma de quitar las miradas de mi. Porque hay que aceptarlo tengo un cuerpo de envidia, con el que todo hombre se deleita y toda mujer desea.
Tome mi bolso y salí de mi habitación. Me marchaba directamente a un lugar peor que el mismo infierno.

ESTÁS LEYENDO
Entre el Cielo y el Infierno
FantasyKatherine es hija de Dios y del Diablo, la única creación hecha por ambos, el único ser que tiene mas poder que ambos juntos. Pero debido a un error que cometió fue condenada a vivir en la Tierra hasta que cumpliera sus 18 años y tenga que elegir en...