Capítulo 2: Añoranza.

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Había llegado el gran día, mi vestimenta estaba preparada, el regalo también.

Sentía una gran felicidad, ¡y no era para menos! Mi mejor amigo tendría uno de los días más especiales de su vida junto a una de mis mejores amigas y una gran compañera, toda la aldea estaba eufórica ante tal festejo, todos mis amigos se la pasaron días enteros luchando por encontrar el regalo perfecto, y todo el ambiente era muy feliz, colorido y amistoso.

El amor se sentía en el aire...

Y es por esa misma razón era que yo sentía innegablemente una gran espina de tristeza clavada en mi corazón.

Al despertar y recordar tan esperada fecha solo pude quedarme mirando el techo de mi habitación, las cortinas oscuras no dejaban pasar los rayos del sol que también despertaba muy feliz, sentí una gran presión en mi pecho, me sentía incómoda y un poco desanimada, ¿cómo es posible que él no vaya a venir al casamiento de su mejor amigo? ¿Lo recordará almenos? ¿Se habrá enterado? ... Lo dudo...

El encuadre del techo que hacían mis ojos somnolientos se veía muy acogedor y desee quedarme en mi habitación todo el día, ocultarme bajo las sábanas y mandar muy buenos deseos a todas aquellas parejas que estarían hoy en la ceremonia mofándose de mucho amor...

Solo quería cerrar mis ojos y dejar salir más lágrimas que la noche anterior, y por enésima vez me regañé por ser tan mala persona con mis mejores amigos.

Era su día especial y solo podía pensar en mi soledad y falta de amor.

¡Qué mala amiga soy! Me obligué a limpiar mis lágrimas y me levante hasta quedar sentada en mi cama, y aun con medio cuerpo estando bajo las sábanas pude observar el bello vestido rosa que había comprado para la elegante ceremonia, sus accesorios y los zapatos que preparé la noche anterior.

El atuendo me gustó tanto que me animé un poco y decidí salir de la cama un poco más tranquila, me puse frente al espejo y me observé atentamente...

Estaba bastante despeinada, con el contorno de los ojos un poco rojos e hinchado, aun con la poca luz que entraba en el cuarto se podía ver mi cara intranquila y me odié por tener ese tipo de actitud en un día lleno de energías tan bonitas.

Me abofeteé mentalmente y camine hacia el ventanal, abrí las cortinas dejando entrar la linda luz del sol y observé las ajetreadas calles de la aldea preparando todo, pues era un acontecimiento internacional.

El sol me daba de lleno en la cara así que cerré los ojos por un momento y dejé que me llenara de calor por unos segundos, se sentía tan cálido que por fin una sonrisa se asomó en mi rostro y con una actitud diferente entré al cuarto de baño para prepararme...

Al cabo de unos minutos salí de la ducha, sequé todo mi cuerpo, me puse la ropa interior y posteriormente el lindo vestido rosa, me calcé los zapatos, agregué un collar en mi cuello y unos brazaletes en mis muñecas.

Procedí a peinar mi cabello de una forma sencilla y me coloqué una diadema roja para adornarme el cabello, me puse un poco de maquillaje muy sencillo y entonces me paré frente al espejo...

El vestido rosa me quedaba muy bien, se acentuaba en mi cintura y la falda caía delicadamente, los accesorios combinaban y por último agregué una pequeña sonrisa en mi rostro, tomé mi bolso y decidí ir en camino a la ceremonia, esperaba encontrarme a todos mis amigos, distraerme y pasarla muy bien.

Aunque cuando llegue al lugar, ver a tanta gente reunida solo para ver a Naruto me conmovió, estaban los mismísimos Kages de las 5 aldeas y sus subordinados, muchos amigos de aldeas cercanas y en especial todo el pueblo estaba ahí para verlo y acompañarlo en tan grande momento...

Empecé a observar a mis amigos y me sentí más cómoda al ver que yo no era la única que estaba sin pareja como acompañante, Lee estaba como siempre entrenando junto a Gai-sensei y eso me causó demasiada gracia, aún más después de ver el rostro avergonzado de Tenten, a Kiba junto a Akamaru y Shino, y todos estaban ahí acompañados como amigos, y no se veían tristes, me animé a acercarme pero entonces se atravesaron dos personas en mi camino.

Shikamaru y Temari caminaban tomados de la mano y ella estaba totalmente sonrojada, el asombro creció en mí y me di cuenta de que ellos estaban juntos, ¡No podía creerlo! Shikamaru estaba enamorado aun cuando toda su vida dijo que las mujeres eran un "fastidio", me causó mucha gracia... pero también un poco de recelo, este aumentó cuando vi a Ino tomada de la mano de Sai, ella se veía tan feliz y eso me causo mucho cariño por esa pareja, que aunque era extraña era muy tierna...

No quería dejar que la sombra del desánimo cayera sobre mí, pero mi corazón se encogió de añoranza y nostalgia, supe entonces que mi rostro había cambiado y solo deseé poder calmarme para sonreír...

Agache la cabeza y seguí caminando hasta que un sonido pequeño captó mi atención y levanté la mirada para encontrarme justamente con un halcón mensajero que volaba hacía mí.

Mi corazón dio un brinco y nerviosamente estiré el brazo para que el ave se posara en él, me percaté del mensaje que traía en su pata y con un poco de entusiasmo lo desaté y el ave voló de mi brazo mientras yo desdoblaba el papel rápidamente.

"Felicidades".

Únicamente decía eso, con tinta negra y bella caligrafía, reconocible totalmente para mí y entonces sentí que mi corazón se detuvo de la sorpresa, y la sangre subió a mi cara enrojeciendo mis mejillas totalmente, posteriormente mi corazón empezó a latir como loco y sentí el cálido sentimiento del amor inundar mi cuerpo...

Levanté la cabeza hacia el cielo y cerré los ojos. ― Sasuke-kun...― Susurré para mí misma y la mención de ese nombre me confirmó lo que pensaba.

Estos pequeños detalles, tan mínimos hacían que mi corazón saltara desbocado y una sonrisa se pegara a mi cara todo el día...

¿Por qué el ave voló hacia mí, si el mensaje es para Naruto? Me pregunté mentalmente e imagine a Sasuke andando en cualquier lugar del mundo...

Él pienso en Naruto, piensa en nosotros... Él piensa en mí.

En ese momento estuve segura, la felicidad invadió mi cuerpo y fui a reunirme con mis amigos, nos tomamos fotografías y cuando llegó el momento de la ceremonia. Me conmoví tanto por ver a Naruto sentando cabeza y tan enamorado por Hinata, la sonrisa de su rostro cuando le entregué la nota de Sasuke me hizo aún más feliz.

Y en ese momento deseé con todas mis fuerzas estar en ese lugar con Sasuke alguna vez, con todo mi corazón, esperaré lo que haga falta...

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Pobre nuestra Sakurachan solita :(

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LO QUE PASÓ DESPUÉS... (SasuSaku)Where stories live. Discover now