一 ¡HEY, PROFESOR! 。

seis.

entonces en aquel mediodía, hoseok se encontraba de pie en la estación de autobuses. internamente lamentaba no haber traído la bicicleta, ya la echaba de menos. cuando suspiró, su mirada se posó en una camioneta hyundai tucson color negro. era increíblemente hermosa, pensó.

cuando aquella camioneta se detuvo justo en la parada de autobuses, el dueño bajó la ventanilla contraria. y por cristo. hoseok cambió de color inmediatamente a un rojo completamente suave.

era el profesor kim.

se veía de lo más atractivo con unas gafas oscuras en su atractivo rostro. —sube —, dijo en voz tranquila mientras sostenía con dureza el volante.

quizás lo hizo porque no habían personas en la parada más que dos ancianos. hoseok estaba seguró que si hubiesen estado chicos que asistían en el colegio, para nada se hubiera detenido taehyung.

entonces con las piernas jodidamente sensibles fue como se acercó a aquella hermosa camioneta. antes de subir sonrió tímidamente. —y-yo...—, ni siquiera se acordaba de lo que iba a decir, así que solo se vio abriendo la puerta y entrando. y dios. el interior olía muy bien, había un fuerte perfume a hombre. quizás taehyung lo hizo a propósito.

con las manos medio sudadas, hoseok se rasco la nuca. estaba comportándose como un tremendo tonto. ni siquiera podía hablar.

sin poder evitarlo, taehyung desvío la mirada a su precioso alumno y no pudo evitar sonreír de lo adorable que se veía con las mejillas y las orejas completamente rojas. —hey, deja la timidez de lado —, susurró mientras detenía el coche en un semáforo rojo. ni siquiera dudó un segundo para acercarse a él. —mírame —, ordenó.

y hoseok no pudo evitar gemir ante aquella orden. sus ojos fueron a dar con los de su maestro cuando su mentón fue agarrado con dureza. —eres maravilloso —, dijo taehyung seductoramente mientras aplastaba con suavidad los labios contra los de hoseok.

y sin dudarlo un poco, hoseok respondió con ternura a aquel suave ósculo.

—usted también lo es... —, respondió con timidez. y posó su mano derecha sobre el mentón de taehyung. —mucho.

por lo que taehyung sólo sonrió y volvió al volante.

🍼

era un restaurante de mariscos al aire libre, la playa estaba justo en frente de ellos. y el viento soplaba de la manera más exquisita en sus rostros, hoseok no podía dejar de pensar en lo bien que se veía el profesor kim con aquellas gafas de sol.

—¿te gustó?—, preguntó taehyung mientras miraba a hoseok beber una michelada sin alcohol.

el joven muchacho tan solo se encogió de hombros. —no es muy rica, pero es pasable con éste clima—, susurró mientras miraba el platillo de su profesor que lucia bien delicioso. incluso ahora se arrepentía de sólo haber pedido un cóctel de camarón.

taehyung asintió levemente mientras le daba un largo trago a su cerveza. dejando incrédulo a hoseok por lo tan bueno que era para beber alcohol. si bien, ya era la cuarta cerveza en tan sólo 15 minutos.

bueno, cambiando de tema.

esta cita era lo mejor que pudo haberle pasado en la vida a hoseok. jamás imaginó que estaría en un restaurante en compañía del profesor que solía regañarlo en demasía. ¡era increíble! taehyung era tan guapo, bastante atractivo que probablemente hoseok babeaba ante una corta mirada.

—es demasiado guapo, profesor... —, susurró. y joder. no lo quería decir en voz alta pero lo hizo  provocando que al profesor kim le diera un ataque de tos. —¡oh, lo siento! —, hoseok rápidamente comenzó a darle palmaditas en la espalda.

Las mejillas de taehyung se tiñeron sólo un poco. no estaba avergonzado... bueno, sí. así que cuando se calmó, lo primero que hizo fue atrapar los dulces labios del más joven.

y por supuesto que hoseok no dudo en responder al suave ósculo. rápidamente envolvió el cuello del profesor kim y ladeo el rostro para sentir más de aquella lengua.

se besaban lento, pero demasiado caliente. taehyung succionaba la lengua mientras le apretaba la cadera. sus ojos se mantenían cerrados.

para cuando hoseok se separó, y abrió los ojos se percató de que detrás de su profesor, estaba un hombre muy parecido a su padre... ¡oh, por dios! hoseok ni siquiera le dio espacio a taehyung para cuando volvió a estrellar los labios contra los de él.

¡su papá estaba en el restaurante!

No movió sus labios. Y eso confundió a tae.

—ahí esta mi papá... —, susurró en voz demasiada baja y temblorosa.

el profesor kim se quedó helado. abrió en demasía los ojos y sostuvo el rostro de su alumno. —maldición—, inmediatamente estrelló al pequeño muchacho en su pecho. slzó la mano para la cuenta, no importaba que acabasen de llegar. estaba en peligro.

no supo cómo pasó. ni siquiera espero a la camerera. solo dejó un billete de 1000 y con hoseok en sus brazos se levantó.

era gracioso. hoseok estaba con el rostro en el pecho de tae y comenzó a caminar de espaldas. muchas personas los voltearon a ver, incluso el señor jung.

la salida estuvo para morirse de la vergüenza. cuando estuvieron finalmente en el auto, el profesor kim, suspiró.

—es hora de llevarte a casa.

hoseok inmediatamente lo volteó a ver. —pero...

—mañana te llevaré a comprar una hamburguesa.

—está bien, pero deme su número de teléfono.

entonces en el rostro de taehyung se formó una traviesa sonrisa. 

—encantado...