Así como las flores se marchitan, la vida se acaba. Creo que es lo único que no puedo comprender.
Aún si miro a los lados al cruzar la calle, hay riesgo. Aún si me alejo de malas personas, alguien tomará el asiento que esta junto a mi. Tal vez un padre ebrio, o un pedófilo, o un asesino, o simplemente un hombre con apuros para no llegar tarde a su primera entrevista de trabajo.
Creo que ya no confío mucho después de lo que pasó, es tal vez una señal, o tal vez un castigo, sí. No debí desconectarla.