Salió de la ducha de muy buen humor, pues hoy era el día.Se vistió con entusiasmo, pero esta vez no se puso la misma ropa de siempre.
Llevaba puesto un pantalón de mezclilla con unos Vans azules, una camiseta color blanca y encima una chamarra negra con bolsillos abierta; decidió no ponerse nada en la cabeza, quería lucir diferente por primera vez para Vita.
Dió una última cepillada a su cabello y bajó al primer piso a tomar un poco de dinero para las entradas, los juegos y algunos bocadillos.
Finalmente, antes de salir, le avisó a su padre que regresaría en la noche, no tan tarde.
Eran las 5:30pm, y Milo ya había cruzado el río para llegar a la casa de Vita.
Tocó la puerta y esperó una respuesta, mas no había sonido alguno. Repitió la acción hasta que escuchó una dulce voz gritar desde el segundo piso "¡Ya voy!". Eso le sacó una ligera sonrisa al castaño, le parecía algo tierno.
Cuando finalmente la puerta se abrió y recibió un saludo del ojiverde, pudo presenciar como estaba vestido su acompañante.
Vita llevaba puesto unos converse negros con un pantalón azúl un poco rasgado, traía una camisa amarilla y encima de está una chamarra café con las mangas dobladas, su cabello bien peinado y hasta creyó haber visto que soltaba un ligero brillo.
Como si fuera poco, Milo notó que su camisa le quedaba un poco corta, dejando ver parte de su ombligo, algo que no se nota a simple vista.
El castaño se sonrojó un poquito, nunca lo había visto con esa clase de ropa.
-Ehh.. ¿Milo? ¿Estás bien?– preguntó al notar que su amigo lo veía fijamente de una forma un tanto curiosa.
Cuando Milo notó el llamado, rápidamente sacudió su cabeza y rascó su nuca algo apenado.
–¡H-hola Vita! ¿N-nos vamos ya?
El rubio sonrió un poco y contestó con un "claro" para luego comenzar a caminar a la par de su amigo.
[Vita]
Mientras caminábamos hacia el parque, noté que Milo no dejaba de verme, me pareció algo extraño pero no le dí mucha importancia
En el camino, noté como él caminaba algo distraído, tal vez pensando en algo o alguien, meh
Se me ocurrió dejar que siguiera caminado para rápidamente pararme detrás de él sin que se diera cuenta, luego lo tomé por ambos hombros y lo jalé hacia atrás provocando que el tonto soltara un buen grito, y en cuestión de milisegundos lo regresé a la posición en la que estaba. En realidad solo lo hice en menos de un segundo, pero el modo en el que reaccionó si que me sacó una fuerte carcajada.
–¡Vita!... ¡Por Dios me sacaste un buen susto, tonto!– me reclamó fingiendo estar enfadado, pero no paré de reír.
–Ay Dios, ¡No puedo creer que no te dieras cuenta!– le dije entre carcajadas.
–¿Ah si?– preguntó de forma extraña, no sabía a lo que se refería pero antes de poder preguntar tomó el mechón que cubría mi ojo derecho y con él me jaló hasta que quedáramos cara a cara, luego de esto me sonrió.
Yo me sonroje un poquito por nuestra cercanía, pero en un rápido movimiento logré pisar su pie izquierdo con mi talón, haciendo que volviera a gritar y me soltara de inmediato alzando su pie para alcanzar a sobarlo.
Yo simplemente volví a reír pero esta vez disimuladamente.
–H-hey Vita– me habló de manera entrecortada –tienes algo en la camisa –conituó señalando esta, ingenuamente yo volteé y el me dió un golpecito con su dedo al levantarlo.
ESTÁS LEYENDO
Nueva Vida.
FanfictionVita creía que su vida era un asco, pero un accidente cambió su vida por completo. Todos esos besos amargos que la vida le había brindado desaparecían con la sola presencia de aquel castaño de traje azúl y su vida se iluminaba, algo interesante para...