4

1K 86 9
                                    

El tiempo avanzaba, logré después de dos meses que Jungkook usará algo apropiado, solíamos platicar en el jardín de las afueras del convento.

Era inteligente, a veces me abría  debates, poniendo la condición de que yo debería de empezar a pensar mejor, ya que ser Gay decía el, era algo que no se podía evitar y que si era un pecado estaba condenado a ir al infierno.

El tiempo pasaba, y el mío lo pasa casi siempre con el, me mostró muchas cosas, me dijo que había muchos padres y sacerdotes al rededor del mundo que apoyaban a la comunidad LGBT.

“¿tu que crees?”

Me dijo una vez.

“yo creo en Dios y tú?”

Le respondí, su respuesta fue muy peculiar.

“creo en un dios benevolente, e igual humano a nosotros, que no juzga, que no impone, que deja ser lo que eres”

Me dijo, levantándose de aquella piedra que se había convertido en su lugar y mi lugar a hora.

Al principio todo fue un desastre, el primer mes fue terrible.

Sus bromas, insinuaciones, todas eran por molestar.

Después de haber pasado un año junto a Jungkook aprendí muchas cosas, aprendí a dejar ser.

Realmente creo que me cambio.

Bajo la mirada de Dios [Taekook +21]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora