🌼[Completa ] 🌼
Quiero ser libre, buscar mi felicidad.
«Él es mi felicidad, mi luz y mi salvación»
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"-Su olor es dulce, el más dulce... Me encanta."
"-Odio mi olor... Lo odio."
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" Pero soy todo lo opuesto, en especial en un mundo donde si n...
No recuerdo cuando comenzó con exactitud...creo que todo empezó después de que mi madre una omega muy hermosa, realmente muy hermosa, no lo digo porque sea mi madre sino porque así es.
Bueno, mi madre dejó a mi padre, un alfa de un alto nivel por así decirlo, simplemente un día ellos discutieron muy fuerte y todo acabó, ella nunca más volvió.
La verdad la extraño mucho, ella era muy buena contigo, yo era su niñito especial, yo también soy omega con ella, pero a papá nunca le gustó eso...decía que los hombres deben ser alfas, que los hombres omegas eran un error, que los hombres de verdad deben demostrar poderío y todas esas cosas machistas, me alegro que mi hermano aún siendo alfa no piense así.
Ahí se encuentra otra persona que también está de mi lado, mi hermano mayor, él me cuida mucho no solo por el hecho de ser un omega, sino porque me quiere mucho al igual que yo a él.
Por otro lado está mi padre, bueno él es especial...como ya lo dije él no cree que sea bueno que yo sea un omega, cuando estaba mi mamá él solo se limitaba a verme de forma descriptiva o ignorarme. Pero ahora, que no está me ha tomado mucha atención, revisa cada uno de mis movimientos y no ayuda mucho que él sea el dueño y el rector de la universidad en la que estudio.
Su trato hacia mi no había cambiado mucho, hasta un cierto día, creo que fue cuando tenía 13 o 14 años, un compañero de mi clase me acompañó a casa, no estaba haciendo nada de malo, quería que le preste algunos apuntes.
Así que lo llevé a mi habitación, simplemente estábamos ahí parados conversando, bueno en realidad le estaba explicando algunos temas que no entendía muy bien, pero nunca pensé que en ese instante llegaría mi padre. Creí que me ignoraría como siempre, que equivocado estaba.
Abrió la puerta de mi habitación y nos vio, sin decir ninguna palabra se dio media vuelta y fue, pero algo muy en el fondo me decía que esto no era así de simple.
Por otro lado mi compañero de clase me miraba de manera sorprendida al saber cuál era mi padre, él también se fue sin decir ninguna palabra.
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Ya iba a atardecer, no tenía tarea así que me coloque el pijama y cuando me disponía a dormir, él entró, con una mirada fría y llena de furia.
No sabía qué pasaba o qué quería de mí hasta que sentí su fuerte mano sobre mi rostro. Estaba muy confundido, nunca me había pegado.
Mientras apretaba mi rostro, me decía cosas que no comprendía.
¿Te gustó? ¿La paste bien? ¿También eres una cualquiera que abre fácilmente las piernas? Repetía una y otra vez. Y realmente no entendía porque me decía eso.
Sus manos descendieron a los costados de mi cuerpo y agarró fuerte de mis brazos y comenzó a sacudirme, exigiendo una respuesta, pero no sabía qué responder.
No sabía que era el comienzo del infierno, cuando me quitó los pantalones y me dejó en ropa interior.
Me quedé paralizado cuando él llevó sus manos a su pantalón y se sacó el cinturón negro que rodeaba su cintura, mientras mi piel ardía, repetía una y otra vez que no llore, que los hombres no lloran. El cinturón golpeaba mis piernas cada vez más fuerte.
No se cuantos golpes me dio, simplemente me había quedado dormido de tanto llorar.
