+3+

231 36 3
                                    

Fué el 11 de diciembre por la mañana cuando la carta de enlistamiento llegó.

"De todos es conocida la grave situación que se vive en Japón tras el bombardeo de Pearl Harbor. De acuerdo a los tratados firmados por nuestra Nación y cumpliendo con lo pactado en la Asamblea de la Organización de Asia, el Comandante Supremo de las Fuerzas Armadas ha decidido brincar todo el apoyo militar a las fuerzos alladas que combaten en el Pacífico. Por tal motivo se CONVOCA a todos los militares nacidos de 1915 en adelante, reservas, guardias presidenciales de tropa, oficiales y demás personal a reportarse de inmediato a la Zona Militar más cercana para recibir un último adiestramiento y enseres para entrentar al enemigo e ir al frente. Quién no actué en consecuencia del mandato presidencial, será considerado traidor a la patría y sometido a proceso militar a la brevedad."

... Todos los militares nacidos de 1915 en adelante...

Yoongi marcharía al frente, en la guerra. Su partída sería a la mañana siguiente, por lo cual sólo me queda este día para despedirle y estar con él. Pero aún así, aún sabiendo el castigo que conllevaria que no fuera, no quiero que se vaya. ¿Por qué? ¿Por qué él? ¿Por qué se le ocurrió esto a su padre? ¿Acaso no le importa poner en riesgo la vida de su hijo? Debe de ser que no, que a mi me importa mucho más Yoongi de lo que a él. No puedo estar tranquilo sabiendo que mañana se va, y tal vez no le vuelva a ver nunca, no puedo soportar la idea de despertarme por las mañanas y no sentir sus brazos a mi alrededor, sus besos y su ronca voz de la mañana.

— Taehyung-ah, por favor, no lo pienses más.

— ¿Cómo que no lo piense más Yoongi?

— No quiero irme sabiendo que vas a estar enfadado, o que vas a estar mal.

— No lo entiendes, mi mundo eres tú, no sé que le pasó a mi familia, no tengo noticias de ellos, no tengo contacto con mis amigos y ahora tú... Tu también te vas y lo peor de todo es que no voy a saber dónde vas a estar ni cómo.

— Te mandaré cartas, siempre que pueda, te escribiré, te contaré cada detalle de dónde esté. Vas a ser en lo único que piense mientras esté ahí, y por lo único que voy a luchar será para volver a tu lado.

Me abracé a él y pareció que fué eterno el tiempo que estuve en sus brazos, calmando mi llanto.

— Te quiero mucho Taehyung... E-eres el amor de mi-mi vida.

Me separé de él y lo único que vi fué el brillo en sus ojos y unas lágrimas deslizándose por su mejilla. Que egoísta fui, y que egoísta soy. Pensando en mi y en como me sentiría cuando yo estaré aqui.

— No no, no llores Yoongi.

— Queria ser fuerte para ti, no quería irme y que me vieras así, pero ya es tarde. – Se rió un poco. – Tae... Yo también tengo miedo. – Parece que fue a cámara lenta como se fué desmoronando todo. – También tengo miedo de no volverte a ver sonreír o de escuchar tu voz. Tengo miedo de morir y de dejarte solo, de no poder formar una familia o de ver si esta sociedad de mierda va a cambiar o no. Tae, como me gustaría poder quedarme a tu lado y criar cachorritos junto a ti.

— Yoongi

— ¿Si?

— Te amo

— Yo también te amo Taehyungie.

— Casémonos.

— ¿Qué?

— Casémonos, cuando vuelvas, quiero ser completamente tuyo.

— Pero Tae...

— Vas a volver, mañana no va a ser el último día que te vea, me niego.

— Pues... Casémonos – se rió y me besó – cuando vuelva voy a encontrar a alguien que nos case, y voy a pasar toda la vida contigo.

Forever {Yoontae; Omegaverse} Donde viven las historias. Descúbrelo ahora