Forever {Yoontae; Omegaverse}

+Prólogo+

Se escuchan muchas cosas, pero todavía nadie sabe nada. Hace unos años, Alemania atacó Polonia y desde entonces el mundo está en guerra. Escribí a amigos que fueron a estudiar a Europa y no he sabido nada de ellos. Aquí ahora mismo en Japón estamos alerta. En la universidad hacemos simulacros por si acaso, pero nunca nos dices el por qué, obviamente por si entramos en guerra, pero, ¿por qué lo íbamos a hacer? Todo esto tiene que ver en Europa, ¿no?

Mientras tanto, mi vida sigue siendo igual de monótona, hace meses que no sé nada de mis padres y los estudios me mantienen ocupado. Lo único que me hace los días mejores es Yoongi, mi novio. Nos conocímos hace ya dos años en la universidad, yo era totalmente nuevo y no me defendía muy bien con el japonés. Me ayudó a encontrar mi aula y aunque él era mayor que yo, me acompañaba a los sitios, empezó a comer conmigo y sinceramente, hizo mis días mejores.

Lo único malo, es que nadie sabe sobre nosotros.

Tenemos que esperar a llegar a casa para demostrarnos cariño y afecto, de otras maneras, podría acabar todo mal, actualmente querer a una persona de tu mismo sexo, no está bien visto y ya nos ha costado varias veces algunos disgustos. Al principio pensamos que no iba a sobresalir, y que si íbamos de la mano,no le hacíamos ningún mal a nadie, pero desgraciadamente no fue así. Ese día tuve que curarle rasguños en la cara, golpes en el torso y heridas en las manos a Yoongi, y todo por protegerme. Desde entonces apenas nos saludamos en la universidad. Sin embargo, la vida de puertas hacia dentro es la mejor. Llego de la universidad y espero a que Yoongi vuelva, comemos mientras escuchamos la radio y nos contamos que tal nuestro día.

Yoongi dejó hace un año la universidad, su padre le obligó a meterse en la milicia para "servir al país" la verdad, a mi no me hace gracia, veo como llega de la concentración, destrozado, a veces duerme allí y otras veces si que viene a casa.

– ¡Taehyung-ah ya estoy en casa!

Se escuchó el típico sonido de sus pesadas botas acercándose a nuestro cuarto.

– ¡Yoongi! ¡Volviste! - Salté a sus brazos, enrollé mis piernas en su cintura.

– Te prometí que hoy volvería a casa pequeño - me besó - ¿qué tal tu día?

– Volvimos a hacer un simulacro y las clases se suspendieron.

Nos fuimos a sentar al sofá y recosté mi cabeza en sus piernas, mientras el acariciaba mi cabello.

– Tae, no te preocupes demás, no va a pasar nada, los Alemanes parecen tener como objetivo Europa.

– Pero Yoon, ¿entonces para qué tantos simulacros? ¿Por qué tanta precaución?

– Son solo medidas de seguridad...

– ¿Y si empieza la guerra aquí también? ¿Que pasará? Tendrás que ir al frente.

– Taehyung, basta, no va a pasar nada. No voy a ir a ningún sitio, ¿si? Voy a estar aquí, a tu lado siempre. ¿Ya está la cena o  quieres que te ayude?

– No, todavía no está, Yoongi, ve a descansar debes estar cansado.

– Me iré a duchar - Se levantó del sofá, me tendió su mano - Me quieres acompañar? - Me sonrió, yo no le contesté nada, simplemente me sonrojé y tiró de mi mano hasta el baño.