𝘕𝘦𝘷𝘦𝘳 𝘍𝘰𝘳𝘨𝘦𝘵 𝘠𝘰𝘶 ; 𝘓𝘶𝘻𝘶𝘱𝘭𝘢𝘺 ༅

⤹ Eιght 𓂃 ִֶָ

◜◟“Bყ Thᥱ Whoᥣᥱ Dᥲmᥒᥱd Worᥣd” ◜◟

◞ 𔘓◝

Una semana había pasado desde el suceso de la serpiente y a Luzu, al fin, le iban a dar de alta ese mismo viernes, cosa que alegró por completo a sus amigos pero sobretodo a Auron, quién había estado visitando al castaño todos los días. No importaba la hora que fuera, él siempre llegaba a ver como estaba, además, él era el que le había estado cuidando su hogar, y justo hoy, antes de ir a verlo y recogerlo del Hospital, estaba arreglando la casa del mayor con ayuda de su mejor amiga, Mónica.
— ¿Estás seguro que limpiaste bien? ¡Huele como si se hubiera muerto un ratón! — Preguntó la pelinegra mientras tapaba su nariz.
— ¡Que sí, hombre! Si tanto desconfías, límpialo tú. — Rechistó el más bajo cruzándose de brazos, la chica le arrebató la escoba y el trapeador para empezar a asear la casa. La cara de Auron al ver toda la suciedad que sacó la jóven hizo que esta empezará a reír muy fuerte.
— Por eso mejor hago las cosas yo, porque al parecer a tí te cuesta. — Bromeó la de ojos azules antes de devolverle las cosas a su amigo. — ¿A qué hora viene tu novio? — Preguntó Mónica colocando sus manos en su cintura y volviendo a ver al chico.
— ¡No es mi novio, es mi amigo! — Gritó el pelinegro con un notable sonrojo en sus mejillas.
— Ajá... Repítelo hasta que te lo creas. — Mencionó la de piel pálida con un tono lleno de burla. — Aún no has respondido mi pregunta. —
— Paso por él a las dos de la tarde. — Dijo Auron sentándose en el sofá. La chica volvió a ver el reloj de la cocina y se percató que faltaban cinco minutos para que se marcara la hora establecida.
— Auron... Que faltan cinco minutos. — Comentó la ojiazul con una leve preocupación, esto provocó que el menor se sobresaltara y empezará a correr de un lado a otro en busca de sus cosas mientras que Mónica reía.
Cuando ya tenía todo listo, le dió un abrazo a su amiga y le dijo que cuando se fuera cerrará la puerta y dejará la llave bajo una maceta, la pelinegra asintió irritada y le hizo un gesto con su mano para que se fuera.
— "Aveces me cae en los conojes, pero como la quiero a la puerca." — Pensó Auron mientras corría hacia el Hospital.

◞ 𔘓◝

El menor llegó al Hospital, fue a recepción para que le dieran el "visto bueno" e ir a donde se encontraba el castaño. Auron subió las escaleras, se dirigió hacia la habitación número quince y tocó la puerta, esperando "pacientemente" a que Luzu le abriera. Escuchó unos pasos acercándose a la puerta y esta se abrió lentamente dejando ver al mayor con una gran sonrisa, Auron se quedó mirando embobado al chico unos segundos para luego darle un abrazo como saludo.
— Que bien que por fin te den de alta. — Dijo el menor separándose un poco del otro hombre.
— Sí... Ya era hora, me hace falta estar en casa con Manolo. — Luzu le dió una mueca al pelinegro para luego besar su frente, cosa que, tomó totalmente desprevenido a Auron, haciendo que sus mejiilas tomaran un tono carmín y esbozara una risa tonta. El castaño se alejó y siguió recogiendo sus cosas mientras que el más bajo le contaba todo lo que había hecho en su casa.
Un tiempo después, el doctor entró a la habitación para decirle a Luzu que oficialmente podía irse de ahí.

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Luzu y Auron salieron del centro médico y se dirigieron a casa del mayor. Cuando llegaron, acomodaron las cosas que el castaño traía de Hospital y le dieron una manzana al cerdito que había extrañado mucho a su dueño. Luego de eso, prepararon unas palomitas y vieron unas cuantas películas, conversaron y jugaron con un Monopoly que había por ahí. Así estuvieron por un buen rato.
Luzu se sentía lleno, pleno, hace tiempo que no sentía esa sensación de tranquilidad, se sentía en paz, todo gracias a Auron, que ahora mismo, se encontraba dormido en su hombro, el mayor no pudo evitar sonreír.
— "Si no fuera por tí, Auroncito... Muy probablemente yo ya no estaría en este mundo, eres es tan... Dulce, amable, gracioso... No tengo palabras para describir lo maravilloso que eres. Soy tan afortunado de tenerte." —
Pensó el castaño antes de caer dormido acurrucado a la par de su querido pelinegro.

Quizás... Auron era el amor que tanto anhelaba.

◞ 𔘓◝