El amor llega sin razón

«12»

Después de desayunar lo que nos preparo Bonnie, nos escapamos por una ventana para no tener que pagarle al dueño del hotel, y corrimos y corrimos sin volver a ver atrás hasta que............ hasta que recobre la cordura y recordé que a mí me educaron con valores entonces después de acabar la el desayuno bajamos pagué la noche que nos quedamos en el hotel y nos dirigimos a nuestras respectivas casas después de despedirnos y darnos un abrazo de despedida; desearía que también me diera un beso de despedida; pero bueno me encamine a mi casa y me acosté en mi cama a pensar en todo lo que había pasado esa noche.

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Después de despedirme de Bon me dirigí a mi casa y en el camino intenté recobrar mis pensamientos de anoche, pero aún tenía dolor de cabeza y esos pensamientos se ven borrosos, así que mejor deje de pensar por un momento y solo me dirigí a mi casa con la mente en blanco.

Cuando llegue a mi casa le pedí perdón a mí mamá por llegar tarde pero se me pasó que Bon no le había dicho que era por qué estaba ebrio así que se lo dije por error.

Bonnie:«Mamá, perdón por llegar, te juro que no vuelvo a tomar en mi vida, pero fueron los amigos de Bon ellos me incitaron y Bon no tuvo nada que ver», le dije mientras recordaba que Bon no le había dicho que estaba ebrio.

Bonnie:«Ya me llevo el diablo», exclamé con temor

Mamá de Bonnie:«Aaaaaaa, con que era eso por lo que no llegaste anoche, por suerte tu amigo estaba ahí para cuidarte, si no quien sabe dónde estarías en este momento; dile a tu amigo que le agradezco las molestias y tú a tú cuarto, estás castigado; aún que creo que con la resaca que debes tener ya es suficiente castigo», dijo mi mamá con un tono de autoridad.

Bonnie:«Osea que ya no tengo que ir a mí cuarto», le dije con un tono de broma.

Mamá de Bonnie«“Me quieres ver la cara de estupida”(el que entendió, entiendo y el que no, no mames)», me dijo mientras me tiraba la chancla que mágicamente apareció en su mano, intenté correr por mi vida pero creo que las chanclas están hechizadas por qué no sé cómo me alcanzó y me dio en la cabeza.

Mamá de Bonnie:«Y no salgas hasta que yo te de permiso», me dijo mientras vi que la chancla volvía como un boomerang a la mano de mi mamá, y me asusté tanto que decidí salir nunca; ok no me encerré ahí hasta que llegó la hora de la cena y tuve que ir a cenar, tenía miedo de ir y toparme con mi mamá pero igual baje a cenar y no salí de mi cuarto hasta que llegó el lunes y tuve que ir al colegio.

*(Por cierto si tenían dudas, el cumpleaños de Bon fue el sábado, luego Bonnie y Bon de dirigieron a sus casas el domingo y luego llegó el lunes, :3).

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Gracias por leer este capítulo, la verdad es uno de los que más me a gustado escribir por qué es muy divertido y graciosa (creo yo, no se ustedes), pero bueno goodbye, auvoir, adios, que les vaya bien en los estudios o en lo que hagan con sus vidas.

Bai :3