─ ¿me harías un favor? ─ preguntó mi hermana, casi rogando.
─ decime y lo pienso, ah ─ le respondí.
─ viste que yo estoy cuidando a los nenes de unos pibes ─ empezó a mover sus manos, explicando ─ bueno, cuestión que me llamaron para ir a cuidarlos hoy a la noche, y no voy a poder ir porque justo Facu me invito al cine ─ la interrumpi.
─ para para, ¿vos querés que yo cuide a unos nenes de unos pibes toda la noche solo para que vos puedas tener una noche con tu novio? ─ le hice un resumen, no es la primera vez que me pide que la cubra en un trabajo.
─ ehm, sí, eso ─ me sonrió.
─ algo a cambio ─ le sonreí de vuelta.
─ decime.
─ quiero que me lleves todas las veces que yo te pida a donde yo quiera, no importa nada, durante 1 mes, ah, y me quiero quedar con todo lo que paguen ─ extendí mí mano, en forma de cerrar el trato.
─ 3 semanas y media ─ extendió la mano también, se la apreté.
─ trato ─ dijimos al mismo tiempo y cada una se fue por su lado.
Subí hasta mi habitación a bañarme porque había salido hace poco del gimnasio.
Me saqué toda la ropa y entré a la bañera, con la esperanza de poder relajarme, estuve no más de 10 minutos hasta que escucho el grito de mí mamá desde abajo.
Me terminé de bañar a lo flash y salí, me puse un pantalón corto de nailon negro con una musculosa rosada flour.
Bajé despacio las escaleras y fui directo a la cocina, encontrándome con una ¿hermosa? imagen: mi sobrino de casi 5 años arriba de la mesada tirando la harina que mi mamá estaba usando para hacer sus típicas galletitas y mi hermano tentado, casi tirado en el piso.
─ OCTAVIO BAJA AL NENE PORFAVOR ─ gritaba mí mamá escondida detrás de la heladera.
─ MIRA PAPI, PARECE QUE LLUEVE ─ gritaba Tiziano, mí sobrino.
─ TIZI, ¿QUÉ HACES MÍ AMOR? ─ entró gritando mí cuñada, Alma.
─ HAGO NIEVE MAMI, MIRA COMO NIEVA ─ no daba más de la emoción.
─ HACE QUE PARE ALMI, POR FAVOR ─ gritó nuevamente mamá.
─ Tizi, veni bebé, vamos a jugar con Flor a los autitos, ¿dale? ─ trató de hablarle calmadamente mientras se acercaba.
Yo no podía más, me dolían los cachetes y el estómago de tanto reírme.
─ NO TE CREO, ME GUSTA LA NIEVE ─ gritó.
─ Titi, vamos a la plaza gordo, jugamos en las hamacas y te compro lo que te gusta ─ interveni.
─ SIIIIIII, VAMOS TÍA ─ bajó de la mesada y corrió hacia donde estaba.
─ ahora venimos, avisen cuando esté la comida ─ avisé mientras le ponía una campera a Tizi.
— tengan cuidado — advirtió mi cuñada.
— no te preocupes Almi — salimos y caminamos hasta la plaza más cercana.
◇◇◇
uf, bueno todavía no termino Candy y ya empecé otra, pero es que la tenía en borrador hace bocha y me re cebo así que acá esta el primer cap, si veo que tiene apoyo la sigo.
espero les guste, es del ysy a bb, dea.
nos vimos❤