Best Friend. [EDITANDO]

Cap 11

N/A: Hice unos separadores, no son la gran cosa pero a mí me gustan.

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Maratón 2/?

El camino a casa fue todo un lío, debido a que durante la madrugada es bastante difícil encontrar algún taxi disponible y más si es en un lugar muy alejado del ambiente acostumbrado, refiriéndome a la ciudad. Para su suerte, jungkook pudo encontrar a un jóven chico muy amable que se ofreció a llevarle, como siempre este dudó en aceptar la propuesta, pero para estar sólo con un taehyung completamente inconsciente a su espalda en media noche, pensó para sí mismo que no era buena idea, así que terminó por aceptar y subirse a aquél vehículo.

Al llegar a su hogar, quiso devolverle el favor al chico pagandole el dinero suficiente para el combustible, pero el chico amablemente negó y pidió que no insistiera en hacerlo, antes de que aquél desconocido hiciera su acto de salida, dijo su nombre, el cual jungkook no pudo escuchar claramente debido a los ronquidos de su amigo.

La puerta detrás de el pelinegro se cerró, guiando así a taehyung por toda la sala hasta arrojarlo finalmente al sofá, el olor a alcohol proveniente de la cavidad de aquél era tan fuerte por lo que miró con desagrado allí y cubrió su nariz de forma repentina sintiendo repulsión ante tal aroma.

— Hueles feo, starlight.— Susurró colocándose de rodillas frente al mencionado. Se quedó admirando por unos largos segundos el rostro tan delicado y hermoso que se traía su mejor amigo, ¿cómo no podría enamorarse de tal obra de arte?.

El mayor se removió en el sofá, golpeando accidentalmente la mejilla del más bajito, el cual ahogó un chillido para no despertarle, tristemente no logró nada ya que taehyung abrió sus ojos con pesadez y en medio de la oscuridad logró captar la imagen de su amigo observándole mientras acariciaba la zona afectada en su mejilla.

Intentó emitir una que otra palabra, pero sus labios resecos y pegajosos apegados uno al otro le impidieron hacerlo, con gran incomodidad humectó sus labios con su propia saliva y al tenerlo los suficientemente húmedos y capacitados para moverlos habló.

— Kook, ¿dónde están los chicos?.— Su voz salió rasposa y muy varonil, algo que ante los oídos del mencionado fue realmente sensual y magnífico.

— Se quedaron en la fiesta, tae.— Respondió levantándose y sentándose a un costado de su mayor.

— ¿Cómo llegamos a casa?.— Volvió a preguntar, aún sintiendo como su mundo daba vueltas y vueltas sin detenerse. Aún no estaba tan consciente del todo.

— Un amable chico nos trajo, tranquilo, todo está bien.— Sonrió sin mostrar sus dientes, lentamente fue acercándose a taehyung hasta recostarse sobre él y abrazar su pecho.

Como si el clima escuchase las peticiones del azabache, las gotas de lluvia empezaron a golpear el cristal de la ventana con una poca de brusquedad y el típico aroma a tierra mojada se adentraba lentamente por medio de un cuenco en la pared por el cual jungkook solía observar hacia las calles cuando taehyung no estaba. Todo parecía ser tan irreal en ese momento.

— Kook...— Volvió a hablar el mayor, su voz ocupando lugar en medio de aquél silencio tan abundante.

— ¿Sí, tae?.— El menor levantó su rostro y se acercó con sutileza acortando la distancia entre ambos.

— Eres mi mejor amigo...— Dijo finalmente volviendo a tirar su cabeza hacia atrás, haciendo que la ilusión en los ojos de su amigo desvaneciera y este simplemente respondiera con un "ajá".