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Chloé se aferro en la chaqueta de su amigo, poniendo si mejilla en su espalda en un intento de que en viento no le golpeara en la cara, ya que tiende a correrse le el rímel. Cuando el viento disminuyó, alzó el rostro encontrando a una Juleka quien nos saludaba entusiasmada. Una ven los pies pisan tierra firmé, se dispone a alzar la mirada.
-Al parecer sera en un bar - resoplo en un intento de olvidar el paso amargo que le traen estos tipos de lugares - de haberlo sabido no vengo -dijo Juleka la agarro del brazo para evitar cualquier escape de cierta rubia. -Te encantará - me sonríe - además no por nada se llama La Rosa Negra. -dijo haciéndola mirar el letrero, una sonrisa se incrusta en sus labios. El letrero era algo viejo dándole un toque algo cutre pero si te fijas bien, los rosales que envuelven uniendo a cada letra lo hacía .. -Encantador.. -dijo ella, suspiro - bueno si me disculpan debo irme - se gira alejándose un poco, Juleka mira a su novio haciéndole morritos. Él maravillado mira a Chloé. -¿¡Chloé!? - le grita
Eso la hace parar en seco, y se gira un poco, tan solo para ver su rostro. - Sé lo que te impide entrar - un escalofrío le recorre la columna vertebral -No dejes que eso te impida de pasar un buen rato. - unas lágrimas se le asoman, púes el sabía lo que esto significaba para ella - aprende a dejar atrás el pasado - ella se gira completamente, viendo la sonrisa que su amigo le da - y comienza a vivir por ti - Chloé en un intento de sonreír, le tiembla el labio y asiente, lentamente se va acercando a él.
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Dentro del bar había una gran barra de madera pintada con barniz dándole un brillo oscuro a la madera detrás de está, hay distintos tipos de licores. Hay un espacio en el bar, también hay un pequeño escenario con su batería, piano eléctrico hasta el bajo y la guitarra eléctrica, el micro estaba en el medio solo, ella miro que detrás de esto había un muro de ladrillos con el nombre del bar incrustado en él.
Juleka se hacerlo a su novio. -¿Como lo lograste? - lo mira apoyando sus brazos en el cuello de él. -Solo necesitaba un empujón - le sonríe uniendo su nariz con la de ella. -¿No me lo puedes decir? - mira como éste se pone serio. -Es algo complicado - y el mira a su amiga quien se quedó observando el lugar. - Es algo que le compete a ella decirlo o no.- Juleka decide no indagar mas en el asunto y une sus labios con los de él, el cuál él corresponde.
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Chloé se sienta en uno de los pocos taburetes que hay en la barra y el bartender se le acerca. -¿Que te pongo preciosa? - dice Ella lo mira, tenia barba algo encrespada y el pelo amarrado en una coleta baja con una cinta en la frente, le sonríe. -Ponme una Coca Cola con mucho hielo y una rodaja de limón por favor. -Sera un placer - se alejó cogiendo un vaso de tubo incrustándole dos hielos y una rodaja de limón, la pone frente a ella abriendo la nevera sacando una botella de Coca Cola, la abre con un abrelatas y me llena hasta la mitad de Coca Cola dejándome ahí la botella. -Aquí tiene, - le sonríe - que lo disfrute - y sin mas se retira.
Chloé le da un sorbo al refresco notando como el frío con el gas baja por su garganta y por un momento le dio la razón a su querido amigo.
