Y de pronto el día está lleno de grises y frío
calando los huesos,
las sonrisas esquivan las miradas
y el silencio truena
entre los árboles
caídos.
Febrero ya no es lo mismo
Y de pronto el día está lleno de grises y frío
calando los huesos,
las sonrisas esquivan las miradas
y el silencio truena
entre los árboles
caídos.