ASIMÉTRICO - Karmaland

Especial San Valentín

¡Féliz San Valentín a todos aquellos que tienen pareja! Malditos suertudos ahre

Para los que estamos más solos que Luther en la luna les traigo este especial para que vean que hasta dos personajes tienen más vida amorosa que nosotros 💖

Siempre buena gente nunca mala persona xd.
Siempre Smile nunca Luzu sad.

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Se había despertado temprano esa mañana, estaba decidido a hacerle el mejor desayuno posible a Samuel... Abandonó la cama que compartía con su pareja y bajó las escaleras de la gran casa rumbo a la cocina...

Empezó por algo simple, calentar el agua... Tenía nervios, no era la primera vez que le cocinaba a Vegetta, pero sí que intentaba algo completamente nuevo como la pastelería... Con ayuda de "Tito YouTube" se propuso a cocinar una receta Argentina, "Panqueques con Dulce de Leche" y un par se agregados más.

Había elegido eso por muchas razones, la principal, hacer panqueques era lo más fácil que pudo encontrar para San Valentín,  el resto de comidas eran súper elaboradas y necesitaban un nivel de cocina que, claramente Rubius no poseía...

Después de pelear un rato con la mezcla y quemar un par de panqueques logró hacer varios, incluso se pasó de cantidades...

Preparó la comida junto a un par de frutas, un café y jugo de Naranja... Lo colocó todo en una bandeja y subió las escaleras intentando no volcar nada ni tropezar.

-Vege...- Le llamó intentando despertar- Vegetta-

Nada... El pelinegro estaba profundamente dormido y, era una de las pocas veces que Rubius podía disfrutar de verlo así... Usualmente era su compañero quién despertaba primero... Se debatió entre dejarle dormir un poco más o despertarlo por un par de segundos...

-Si no te despiertas voy a darle lo que te preparé a Alex o Mangel- susurró en la oreja del mayor-

-Les reviento la casa- Dijo un molesto Vegetta por ser despertado y por lo que acababa de escuchar-

Samuel se sentó en la cama bostezando y en cuándo abrió los ojos se encontró con la preciada bandeja de Rubén... Los ojitos del pelinegro brillaron...

-Feliz Año nuevo Vege- sonrío el castaño-

-Felices Pascuas cabezón- El oji morado agarró la bandeja dispuesto a probar la gran obra de arte que su querido le había preparado-  Siéntate conmigo Rubiu- Vegetta palmeó la cama para que el menor se sentara- Por cierto, también tengo algo para darte...-

-¿De verdad?, pero si no hacía falta...- Sonrió pensando que Samuel le había comprado su perfume favorito, como todos los años- ¡Justo se me ha acabado!-

-¿Eh?- El pelinegro lo miró sin entender- ten tú también debes comer- le acercó el tenedor-

-¿No es mi perfume?- sorprendido aceptó la comida- 

-No- el mayor rió- Ya lo verás... -

Terminaron de comer y juntos bajaron, Rubius agarró la bandeja dispuesto a lavarla, pero Samuel le frenó...

-Eso para después... Ahora quiero darte mi regalo-  Le tomó la mano al menor-

Juntos caminaron hasta la casita del árbol, la usaban de vez en cuando para estar juntos viendo las estrellas o para reunirse con sus amigos... Subieron y apenas Rubius puso un pie dentro. las ganas de llorar lo inundaron...

Un hermoso cartel estaba colocado en una de las paredes del lugar, en él se podía leer "Ninguna otra estrella se compara con tu belleza" Rubén sonrió girándose... Ahí se encontraba Samuel arrodillado con un cartel detrás que decía "Doblas ¿Te casarías conmigo?"... Una pequeña cajita de terciopelo reposaba en la mano de su Vegetta...

-¿Qué dices?- Las lágrimas comenzaron a bajar por las mejillas del menor... Se sentía tan afortunado... tan feliz- ¿Me harías el hombre más felíz del mundo por segunda vez?-

-Qué propuesta tan rara- Contestó haciendo sonreír al mayor- pero sí, toda la vida Vege- Volvió a pronunciar las mismas palabras que aquella vez bajo las estrellas...-

Samuel se paró colocando un bello anillo en la mano de Rubius y besando dulcemente sus labios... Ambos estaban decididos a nunca separarse del otro, porque así eran felices... Dicen que para encontrar a tu alma gemela debes de sufrir un poco en el trayecto y estos dos sufrieron demasiado para encontrarse... 

Rubén miró fijamente a los ojos a su amado y allí encontró su hogar... Él era todo lo que el castaño quería en su vida... 

Vegetta apreció la sonrisita de Rubius y allí supo, una vez más que eso era lo que quería ver en su vida... Que no necesitaba nada más que el amor de su compañero...

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