No es fácil olvidar |Aizawa Shota y tu|

HAPPY VALENTINE'S DAY.

Termino de pintar mis labios con el tono rosa palo y me inspecciono en el espejo. Ojos levemente pintados, labios pintados, vestido perfectamente planchado y perfume suave.

--A la mierda este no es mi estilo-- bufo empezando a quitar el maquillaje, el vestido y sustituyéndolo por unos pantalones y blusa.

Salto del susto mientras me coloco las zapatillas al escuchar el timbre y corro a abrir la puerta, sorprendiéndome al no ver a nadie. Dudosa vuelvo a cerrar con un suspiro y al darme la vuelta casi me agarra un paro cardíaco al ver a Shota parado con una sonrisa en su rostro.

--¿Acaso quieres matarme de un susto?-- chillo molesta y golpeo su hombro.

--Sabes que no puedo entrar por ahí, las cámaras grabarían mi rostro y la policia estaría también detrás de ti-- susurra abrazando mi cuerpo con suavidad.

Suspiro y devuelvo el gesto, tratando de grabar el calor de su cuerpo, sus brazos al rededor de mi cuerpo y el sonido de su corazón. Levanto la vista y los ojos negros de Shota me analizan con detalle.

--Te vez hermosa, aunque te hayas quitado el bonito maquillaje que traías-- comenta sonriendo.

Él besa mis labios antes de poder decir palabra alguna y sin quejas me dejo llevar. Sus manos juguetean con mi blusa antes de adentrarse por completo y tocar mi piel, quemándola a medida que recorre mi espalda. Empieza a caminar hacia atrás entrando a mi cuarto y se deja caer en la cama, dejando mi cuerpo encima del suyo. El tierno beso de antes queda atrás cuando nuestras lenguas se encuentran, dejando paso a nuestro deseo reprimido por tantos años.

--Parece que el sensei está de buen humor-- bromeo moviendo mi cadera al sentir su miembro duro en mi trasero.

--Te has vuelto una atrevida, chiquilla-- suelta con una pequeña risa.

Besos sus labios pausadamente y con una mano acaricio su corto cabello. Aún no puedo creer que se lo haya cortado, le queda jodidamente sexy. Sus manos vuelven a mi blusa y la quita dejando a la vista mi sujetador negro. Empieza a besar la montaña de mis pechos y siento como una de sus manos se entretiene tratando de desabrocharlo. Cuando logra su cometido deja mis pechos completamente al desnudo y no tarda ni dos segundos en llevarse uno a la boca.

--Han crecido-- susurra apretando mi otro pecho con su mano.

--Ci... Cierra la boca Shota-- me quejo avergonzada.

Decido meter mis manos entre nosotros y subir su polera. Él se sienta y termino de quitarla para empezar a bajar besando su torso. Al llegar al inicio de su pantalón siento como suspira y trata de tener un poco más de contacto conmigo.

--Tranquilo, sensei no se apresure-- susurro subiendo nuevamente.

Él gruñe y cambia nuestras posiciones para empezar a bajar mi pantalón y bragas. Me quita las zapatillas para terminar de sacar mi ropa y una vez desnuda hace lo mismo con su pantalón. Veo como antes de tirarlo saca un paquete dorado del bolsillo y lo abre.

--¿Acaso creció?-- suelto sorprendida al ver su miembro. No lo recuerdo tan... Grande.

Él sonríe con orgullo y cuando termina de colocarse la protección empieza a adentrarse en mi con lentitud.

--¿Estás bien?-- suelta con la respiración cortada. --Mierda ____ debes relajarte.

--Lo lamento-- digo abrazando su cuello y recibiendo pequeñas caricias en mi cabello.

Levanto la cabeza y nos besamos al mismo tiempo en que él empieza a moverse. Pequeños gemidos escapan de mi boca y Shota me pide que no me contenga, aumentando la velocidad de las embestidas.

--Shota... Te amo-- medio grito abrazándolo.

--También te amo-- gruñe clavando sus dedos en mi cadera.

Mi cuerpo empieza a quemar y mis piernas a temblar, signo de que no me falta nada para llegar a mi orgasmo. Él parece darse cuenta ya que sonríe y sus embestidas se vuelven levemente más profundas.

--¡Shota!-- suelto besando sus labios cuando llego al mejor orgasmo de mi vida.

Él da unas embestidas más y se corre en el preservativo. Al salir de mi se lo quita, lo ata y lo tira al tacho de basura que está a un lado de mi escritorio. Se acuesta a mi lado y nos tapa con la sábana.

--Descansa-- pide besando mi frente.

Me abrazo a su pecho y mis ojos empiezan a pesar. Lo último que escucho antes de dormirme es un "Te amo pequeña".

...

Cierro los ojos con molestia cuando siento el sol en mi cara y me doy la vuelta para seguir durmiendo. Pero al recordar que Shota estaba conmigo me siento de golpe. A mi lado no hay nadie, su lugar esta completamente frío y lo único que hay es un papelito con una nota.

"FELÍZ DÍA DE SAN VALENTÍN".

--Felíz día Aizawa Shota-- susurro entre pequeños sollozos.

...