Hated boy. [Kimetsu no Yaiba AU] Tomioka x reader

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Pasé unos días tratando de buscar la dirección de la casa de Tomioka. No me malinterpreten, son por buenas causas. Me di cuenta tarde que San Valentín se acercaba, justamente a unos días de lo que fue el cumpleaños de Giyuu. Bueno, ahora el dirá algo como "genial, premio doble", porque si, le compré otro regalo...

Lo admito no me pude contener en querer hacerlo feliz aunque sea una vez más. No sé muy bien si le gustan los dulces o no, pero no me quise arriesgar así que preparé uno de esos globos enormes y una carta un poco más extensa que la anterior.

Antes que sea la salida de la escuela, pondré una excusa para salir temprano y así dejarle su regalo en su casa. Será una sorpresa un poco extraña que causará miedo pero algo es algo.

Estoy segura que le alegrará.

...

En las clases, veo a mis compañeras con globos, chocolates y demás cosas que seguramente sus novios les han dado. Es lindo. Y bueno, hasta ahora solo me han dado una brocheta de bombones y una paleta de caramelo que una amiga me dió y otra compañera.

No espero realmente nada, yo casi no interactúo abiertamente con los demás. Sí tengo amigos pero pues... Qué decir.

Lo que si me interesa ahorita, es mi chico. Si, le digo mi chico porque hasta ahora en lo que llevo de la universidad, es al único que le he dedicado mucho tiempo. Ya se puede considerar un crush.

Lo miro y noto que en su mesa no hay nada, absolutamente nada. Demonios. ¿Por qué es tan cruel la gente con él? Debería acercarme y darle un abrazo... Aunque sea desearle un buen día.

Pero... ¿Y si descubre que yo soy la de los regalos?... ¡Quedaría en ridículo! Ah, diablos. No sé qué hacer. Es tan complicado todo esto.

Lo dejaré pasar, aunque me duela mucho.

...

Ahora en el receso, Kyojuro se me acercó para darme un chocolate en forma de corazón de tamaño mediano. Me sorprendí pues no lo esperaba.

-¡Feliz San Valentín, ___!

-Gracias, Kyo. -Le sonrío.-

No debería pensar esto pero... Espero no sea una confesión. Él sabe que ya tengo un interés en aquel azabache solitario.

-No hay de qué, espero puedas acercarte pronto a él. -Me codea y me sorprendo.-

-Eh... ¿A qué te refieres?

Sus ojos grandes miran a Tomioka haciendo fila para el almuerzo y luego a mi repetidas veces.

-¡Ah! -Me exalto.- ¿Cómo lo sabes?

-Es obvio. Lo supe desde que me preguntaste por él. -Levanto las cejas sorprendida.-

-Comprendo... -Me río con nervios.-

-¿Y? ¿Le vas a dar algo?

-Tengo planeado algo... Si. Pero no quiero que sepa quién soy aún, solo se los dejaré en su casa antes de la salida. -Hago una mueca.-

-Deberías acercarte ya, él se va a desesperar al pensar que no vas a aparecer. -Tiene razón.-

-¿No será muy rápido?

-¿Cuánto tiempo llevas interesada en él? -Pienso unos segundos.-

-Ya son tres meses... ¡Tres meses! Se me fue volando el tiempo.

Perdí totalmente la noción del tiempo por estar preocupandome por él, cielos. Ya ha pasado tanto tiempo.

-Acercate ya. Puedes preguntarle sobre él y así lo conocerás mejor.

-Pero yo ya estaba juntando información por mi cuenta...

-Acosadora.

-¡Definitivamente no!

Nos quedamos callados unos momentos, él mirándome acusador y yo reflexionando.

-Bueno, quizás un poco.

-Ya le va a parecer raro que te aparezcas en su casa. Pero si tu decisión es seguir con el secreto apúrate a pedir el pase de salida, adelante.

-¡Oh, si! ¡Gracias, Kyo! -Le beso la mejilla y salgo corriendo.-

Siguiente parada, casa de Tomioka.