Capítulo 7

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• Como lo pensé. Todo esto es mi culpa. Solo mía. Me sacan de la habitación, estoy muy aburrida, quiero hablar con alguien. Encuentro a Adam sentado solo, así que decido ir. Llegó, él está sentado con lágrimas en sus ojos.

– ¿Adam? ¿Qué te pasa? – Le digo mientras me siento. No me responde solo nos miramos por un segundo.

– Estoy enamorado de Beatriz. – dice sin ningún preámbulo.

Lo sabía, siempre lo supe. Aunque nunca quise preguntar.

– Ya lo sabía – Sonrió. Él me abraza, y llora en mi hombro.

– Lizi me duele mucho por lo que ella está pasando…– Su voz se corta

–Adam sé que es difícil, pero se fuerte… por ella. – Le digo mirándolo a los ojos. Él acierta.

– Por cierto, ¿Dónde están todos? –Le digo.

–Fueron a hablar con los padres de… ¿Valentina?– Me dice.

Otra vez llega la culpa y empiezo a llorar. Adam me abraza, Y fue peor. No entiendo por qué me está pasando esto a mí. ¿Qué hice? En ese momento entran los padres de Beatriz corriendo hacia donde me encuentro.

– Lizi ¡Beatriz despertó!

– ¿Qué? ¿ENSERIO? – Les digo mientras me levanto a abrazarlos.

Adam también se levanta y nos abrazamos todos. ¡Es increíble, mi amiga despertó!

– Lizi, entraremos. ¿Te parece? – Dice Elena.

– Claro. – Adam y yo respondemos.

Nos volvemos a sentar. Cuando en ese momento mis padres entran.

– Lizi mañana será el funeral de Valentina– Dice la mamá de Tod.

La abrazo. Estoy llorando. Todo es tan incierto, necesito saber Valentina por que se suicidó. ¿Por qué es mi culpa? ¿Qué le hice? Cuanto quisiera poder hablar con ella tan solo unos minutos. No quiero quedar con este remordimiento.

– Todo esto es mi culpa– Digo en el hombro de Lucia.

– Mi niña, cálmate. Lo que paso no es tu culpa. – Me dice lucia a mi oído.– Pequeña es un momento difícil. Pero no tienes por qué culparte de los problemas por los que ella estaba pasando. La vida es una mentira, la muerte es una realidad. Tan solo tienes que darte cuenta que el momento de ella fue hoy. – Me mira a los ojos. – Prométeme que nunca te harás lo que ella se hacía en sus brazos…– Me quedo solo mirándola no puedo responder– LIZI PROMETEMELO

– Lo…prometo– Vuelve abrazarme Lucia.

Nos quedamos así durante unos segundos. Mi mamá está con Adam. En esos momentos sale una enfermera de la habitación de Tod.

– Señora Lucia, Su hijo quiere hablar con usted– Nos dice la enfermera.

– Ya vuelvo– Me sonríe, con esa perfecta sonrisa, como la de Tod.

Ya han pasado 2 horas estoy muy cansada, quiero dormir.

– Mamá ¿podemos irnos? – Le digo. Adam ya se había ido para la universidad.

– Vamos. – Cuando llegamos mi Lucas está más feliz que nunca al verme. Siento que ha pasado como un siglo desde que no me ve. No se despega de mi lado. Decido dormir con él. Como es de lógica no puedo dormir, aún no soporto la idea de que Valentina este muerta…y mañana será la última vez que le vea. Que Tod me odie y que mi amiga tiene un tumor que seguirá creciendo. Estoy en una jodida situación. Tan solo darme a la idea de que mañana Valentina estará en un Ataúd, y que todos los familiares este llorando su partida, causalmente ya cuando está muerta, pues nadie supo realmente por lo que ella estaba pasando, como en vida no la valoraron, tal vez su culpa les pese y vayan a demostrarle ‘’lo mucho que la querían’’ lo buena persona que era en vida…pero como ahora ya no está. ¿Quién sabrá por qué se habrá suicidado? los muertos no hablan y lo único que puedo hacer es aceptar que está muerta, también pienso en las palabras que me dijo Lucia, En la última conversación con Valentina, en lo que Tod me dijo… ¿Seré yo la causante de todo esto?...Después de unas horas oigo la voz de mi madre

Mi HistoriaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora