Mi Historia

Capítulo 15 (final)

·       El derrame cerebral, y el tumor mantuvieron viva solo 1 día a mi amiga. No aguanto, la noticia de que Adam fue el responsable de la muerte de sus mejores amigos, no fue nada bueno para su tumor. Deciden llevarme al funeral de mi amiga, está ahí hermosa, con su labial, solo que esos hermosos ojos azules se apagaron, no los volveré a ver. Muchos me dan los pesares a mí, la familia de Beatriz están destrozados, al igual que la mamá de Tod, y la familia de Eric, todos, tal vez porque no tengo piernas, y por qué estoy sola. Me dan una rosa, cuando volteo a mirar quien me la da es Mónica, que me sonríe. No puedo devolverle la sonrisa, simplemente no puedo. Tengo dos personas a mi lado, quizá son enfermeros, no me interesa tampoco, mi amiga se la están llevando de este mundo, se reunirá con todos, y me dejará sola aquí. Me tiro de mi silla de ruedas

–Beati ¡No me dejes por favor! –Digo llorando. Las personas que estaban detrás de mi me alzan

–¡¡Suéltenme por favor!! –les digo llorando, con lo poco que queda de mi

Ahora estoy aquí, encerrada, han pasado ya un mes desde que mis amigos murieron, y me tienen con un chaleco blanco, por lo que he oído decir es que estoy en un psiquiátrico, creen que estoy loca… y con este chaleco tal parece que creen que puedo hacerme daño, ¿mi familia? Nunca viene, tal parece que vinieron hace una semana, o quizá fue ayer… no lo recuerdo. Lo único que sé es que la señora lucia viene a visitarme y pasa la tarde conmigo, me trae rosas, y siempre me lleva a la tumba de Tod, de Eric, Valentina y Beatriz para dárselas a ellos. Siempre llora, no sé por qué. Me ha dicho que soltaran a Adam, le darán casa por cárcel hasta que cumpla los 18 años, y quiere que lo vea, el me pedirá perdón según ella, él no tiene la culpa ya que Adam solo estaba pasando, no sabe nada. Quizá lo vaya a ver.

–señora lucia ya son las 6:30 debo irme Eric vendrá. –Le digo

–Por supuesto Lizi–Me lleva

Cuando llego, me arreglo como puedo y me siento junto a la ventana que tiene mi habitación, son las 7:00

–Ya debe venir, no demora en llegar –

Son la 8:00 y las 9:00

–¿Por qué no habrá venido?

–Cariño ¿Por qué no viniste?–

Al otro día es lo mismo, son las 7:00

–mi amor debe está por venir–

son las 8:00 y las 9:00.

–¿Cariño este enojado conmigo? No te enojes, ¿qué te he hecho? Prometiste que nunca me dejarías sola.

Así pasan los días, todos los días.

Son las 7:00, 8:00 Pero ya entendí, que él no volverá. Hoy sueltan a Adam, aquí está la señora lucia.

–Señora lucia, ¿podría llevarme a hablar con Adam?–Le digo

–Claro espérame aquí pido permiso para sacarte– Sonríe y se va.

–Eric...cariño si tu no vendrás, yo iré a verte ¿te parece? –Digo

Cuando llega la señora.

–Si Lizi si te dejaran ir. ¿Nos vamos ya? –Me pregunta

–Sí, pero antes ¿podemos arrimar a mi casa? –Le digo

–Claro–Me sonríe. Y nos vamos.

Cuando llegamos mis padres salen corriendo a abrazarme, y entramos, saludo a Lucas, y me preguntan como he estado, se sientan a hablar con Lucia. Entro al cuarto de mi papá y sacó su arma. Cuando salgo

–Ya podemos irnos–Le digo a lucia

– ¿Tan pronto? – Pregunta mi mamá

Son las 6:00 se está haciendo tarde.

–Si ... ¿podemos irnos? –Pregunto a lucia.

–Si tú quieres–Me lleva al carro

Nos despedimos de todos. Mis padres sonríen pero se nota en sus ojos que están a punto de llorar.

Mientras vamos andando lucia me ve y me dice

–Cariño espero que el perdón este en tu corazón

La miro

–Si señora–

–Él es una buena persona, todos cometemos errores–Me dice.

Solo miro hacia al frente, no logro mirarla.

Cuando pasamos por las vías del tren. Llegamos, está Adam afuera esperándonos, me abre la puerta del carro

–¡¡Lizi!! ¿Cómo estás? –Me pregunta.

–Bien–Le digo

Me saca mi silla de ruedas y me ayuda a sentarme en ella

–Si supieras toda la cena que te prepare–Me dice sonriendo.

Lucia sale

– ¿Qué haces afuera? No puedes salir. Ven te ayudo Lizi–Le dice a Adam

Cuando entramos, él se sienta frente a mí.

–Los dejare a solas, serviré mientras la comida–Nos dice sonriendo Lucia

Nos quedamos un minutos en silencio

–Lizi quiero pedirte perdón– Me mira a los ojos

Miro el reloj, son las 6:40

–Adam ¿y esa foto? –Digo señalando una en la que él esta con Eric.

Él se levanta sonriendo mientras va directamente hacia donde está la foto, saco el arma y le apunto a su cabeza

– ¿Estás preparado? –Pregunto

– ¿De qué hablas? –Voltea.

Y disparo.

Salgo de la casa en mi silla de ruedas, se va a hacer tarde son las 6:50 debo ser puntual con Eric, llego a las vías del tren, y me tiro en ellas.

–Cariño, ya casi nos vamos a ver ¿no estás emocionado? – Digo mirando al cielo y empiezo a llorar.

– ¿Tod? ¡GANAMOS!... Ahora me lo agradeces ¿de acuerdo?–Sonrió

Escucho el pito del tren.

–¡¡LIZI!! –grita lucia

–Beati, Juntas por siempre….

  

AUTORA: Isabella Arias.