· Y me voy.
Me quedo en la puerta de ella. Solo lloro. No puedo creer lo que mi amiga causo, lo que nunca supe. Tuve mis ojos vendados, y nunca nadie puedo quitarme la venda. Decido ir a la casa de Tod. No quiero ir a mi casa, necesito hablar con alguien, y tal parece que la única persona que me queda es Tod. El recuerdo de Valentina ahorcada, vuelve a recorrer en mi mente. Y ahora saber que mi mejor amiga, no era la persona que conocí. Pase por las vías de un tren, me atrae tanto este lugar. Cuando estoy a punto de llegar a la casa de Tod, decido sentarme en la banca que tienen ellos afuera de su casa. Quiero escuchar a Mariah Carey ella podrá ayudarme un rato. Está canción, es perfecta MY ALL.
Dime si me sientes imaginando verme frente a ti,
Siempre estás presente, y en mi sueños logro descubrir,
Que aunque ya no estás mi estrella fugaz, te seo alcanzar.
Mi todo yo te doy por una noche más,
Y así poder sentir tu cuerpo junto a mí,
Ya no puedo estar repitiendo aquí nuestra canción,
Mi todo te lo doy por tener tu amor.
· – ¿Lizi? ¿Qué estás haciendo aquí a estas horas? – Me pregunta la mamá de Tod.
– ¿Señora Lucía?... – Miro en ese momento que anocheció. ¡Me quede dormida! – ¡¿Qué horas son?! –Pregunto.
–Son las 2 de la mañana Lizi, Vamos entra. Debes estar congelada. Llamare a tus padres, les diré que estás aquí. –
–Gracias Señora – Le digo. Entro, mientras ella coge el teléfono y llama a mi casa, yo me siento. Miro todos aquellos recuerdos que tiene de todas las partes en la que han estado. Escucho a Lucia hablar con mis padres, tal parece que estaban muy preocupados, o peor, están muy enojados. No entiendo cómo me puede quedar dormida.
–Lizi… – Me dice la mamá de Tod, mientras me trae una manta con una almohada– Tus padres estaban muy angustiados, Pero dejaron que te quedarás es lo mejor. Ten, duerme aquí en este sofá. – Me da la sabana. –Ya vuelvo – Se va para la cocina. Acomodo el sitio en el que dormiré, cuando me acuesto llega lucia
– Toma lizi, es chocolate caliente – Sonrió.
– Gracias Señora Lucia, Muchas gracias– Le digo. Ella me devuelve la sonrisa
– ¿Tod? – Le pregunto.
– Se quedó a dormir con un primo de él. No quiso pasar la noche en la casa. – Que descanse– Le sonrió. En ese momento ella se sienta y me mira a los ojos
– Lizi Dime que te pasa. Puedes confiar en mí. – Me dice.
– Señora, no me pasa nada. Le agradezco mucho su formalidad. Estoy muy bien. – Le digo abrazándola. Ella me da un beso en la frente
– Descansa Lizi– Y se va.
Ha pasado ya un mes. Todo un mes desde que no veo a Beatriz, me informo de cómo está por Tod, que la visita constantemente, ella está mejorando. Me he vuelto muy buen amigo de Adam, ya que Beatriz y él son novios, él siempre me dice que debería ir, ya que somos amigas desde ya hace mucho tiempo, me dice también que su tumor ha parado de crecer y se encuentra mejor –Gracias a Dios–A pesar de que lo que ha pasado la extraño mucho, pero he decido no verla. Solo por un tiempo. Ha pasado un mes desde que no veo a Eric, desde que paso aquella vez en el parque, solo no he querido volver a verlo, aun así el venga a verme. Ha pasado un mes desde que lo espero en mi ventana siempre a la misma hora, esperándolo llegar. Cuando un día llega Adam, me invito a salir a dar una vuelta, por el parque. En el mismo lugar donde tuve mi última pelea con Eric. Cuando vamos caminando decidimos sentarnos en una banca, yo suelo quedarme callada, no quiero hablar, este lugar es el peor lugar. ¿Por qué me trajo aquí? Estoy a punto de decirle algo, cuando el habla primero
–Él te extraña mucho ¿lo sabes? – Me dice.
– Lo sé – Le digo, mirando al suelo. No quiero mirarlo a los ojos ¡es idéntico a Eric!
– ¿Por qué no hablas con él? Lizi tu eres todo para el… ¿A caso tu no lo extrañas? – Me dice.
– ¡Claro que lo extraño! – Le digo.
– ¿no quieres volver a verlo? –Me pregunta – Lizi mírame a la cara y me dices que no quieres volver a verlo ¡DIMELO! – Si quiero estar con él. – Le digo mirándolo a los ojos. Y en ese momento llegó Eric con un ramo de rosas, con su loción que no puedo resistirme a ella, y él lo sabe, atrás de él se encuentran Tod y …¿Beatriz? Con un letrero muy grande, en ese letrero dice ‘’¿Nos perdonas?’’ Beatriz está hermosa, solo puedo sonreír. Miro a Adam, él se levanta a ayudar a Beatriz que está en silla de ruedas. Eric se acerca, me da un beso en los labios y se arrodilla dándome el ramo
– Cariño ¿nos perdonas? – Me dice Eric.
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Mi Historia
Teen Fiction"Siempre a la misma hora y tras la misma ventana ella estará esperándolo"