Si es imposible escapar de alguien, es de Kanroji Mitsuri. Tímida, amable y fuerte. El pilar serpiente se enamoro rápidamente y sin querer de Mitsuri.
No importa cuanto lo intente, la cercanía de otros hacia Kanroji, lo irrita, se molesta fácilmente. Y eso sinceramente es penoso. La fémina siempre esta rodeada de obstáculos y la idea de que encuentre a quien busca lo aflige.
La mujer de cabello rosa pálido y extensiones verdosas se encuentra en el umbral de la casa, mordiéndo nerviosamente los labios y ocasionalmente mirando sobre el hombro de Shinobu. En manos temblorosas detrás de ella se encuentra un pequeño ramo de lirios frescos de la tonalidad de su cabello.
Obanai Iguro desearía acercarse a la fémina, Iguro desea poder hacerlo. Pero para un chico de sangre sucia esa felicidad es utópica. Obanai esta cansado, solo desea derrotar a Muzan y morir.
Ahora el pilar serpiente se oculta en un rincón sombrío y reza para que la muerte purifique su sangre sucia. Entonces piensa, si renace como un ser humano en un mundo pacífico sin Demonios, le contara sus sentimientos por ella.
